Las tensiones en el Mar del Sur de China volvieron a ser el foco de atención durante las conversaciones de seguridad celebradas en Laos, donde ministros de defensa del sudeste asiático se reunieron con sus homólogos de Estados Unidos y China, entre otras naciones. La creciente asertividad de Beijing en sus reclamaciones territoriales ha generado un aumento de las confrontaciones, generando una atmósfera de tensión en la región.
El encuentro entre Austin y Dong: Un diálogo tenso
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, y el ministro de Defensa chino, Dong Jun, se encontraron cara a cara en una reunión a puerta cerrada. Este encuentro se dio un día después de que Dong rechazara una invitación para una reunión bilateral con Austin, un movimiento que el secretario de Defensa estadounidense lamentó, calificándolo como un ‘retroceso para toda la región’.
La negativa de China a un encuentro individual se produce en medio de crecientes fricciones entre ambas potencias. Las tensiones se han intensificado por la reciente aprobación de Estados Unidos de una venta de armas de US$2.000 millones a Taiwán, incluyendo un avanzado sistema de defensa de misiles tierra-aire, lo que ha generado una fuerte respuesta por parte de Beijing.
“El lado estadounidense no puede socavar los intereses fundamentales de China en el asunto de Taiwán al mismo tiempo que realiza intercambios con el ejército chino como si nada hubiera ocurrido”, dijo el portavoz del Ministerio de Defensa chino Wu Qian en un comunicado publicado en línea el jueves.
Las preocupaciones de la ASEAN y el cambio en la Casa Blanca
Las naciones miembros de la ASEAN observan con cautela el cambio de gobierno en Estados Unidos, en particular, el impacto de la victoria del presidente electo Donald Trump en las políticas hacia el Mar del Sur de China. Bajo la administración de Biden, Estados Unidos promovió una política de “Indo-Pacífico libre y abierto”, una postura que aún no está clara cómo será abordada por la nueva administración.
La incertidumbre sobre la política estadounidense hacia la región genera una preocupación adicional entre los países miembros de la ASEAN. China ha instado a resolver los problemas mediante el diálogo y a evitar introducir fuerzas externas, una sugerencia que llega en medio de las tensiones en curso.
El papel de Estados Unidos y el apoyo a Filipinas
Estados Unidos mantiene una fuerte presencia militar en la región y ha expresado una seria preocupación por las acciones desestabilizadoras de China, incluyendo las peligrosas maniobras navales de la República Popular China contra buques de Filipinas y otros estados costeros. Se comprometió a seguir apoyando la postura de la ASEAN ante los reclamos territoriales de China.
China ve este respaldo estadounidense como un factor que ha envalentonado a Filipinas a actuar de manera más asertiva en sus disputas con China por el Mar del Sur de China, añadiendo una capa más de complejidad al panorama de la seguridad regional. La relación entre ambos países y la postura de Estados Unidos ante ella serán claves para observar en los siguientes meses.
Más allá del Mar del Sur de China: otros puntos de conflicto
La reunión en Laos no se limitó únicamente al Mar del Sur de China. Participaron países como Japón, Corea del Sur, India, Rusia, Australia y Nueva Zelanda, lo que indica la complejidad geopolítica de la región. Las conversaciones también trataron tensiones en la península de Corea, la guerra entre Rusia y Ucrania y los conflictos en Medio Oriente.
Además de estos temas globales, la reunión abordó también la crisis en Myanmar, que se encuentra en plena guerra civil y una grave crisis humanitaria. La situación en Myanmar supone una seria prueba a la credibilidad de la ASEAN, con el ejército gobernante excluido de las reuniones desde 2021, aunque representado por altos funcionarios.
Un futuro incierto
Las tensiones en el Mar del Sur de China y los demás conflictos tratados en Laos reflejan un panorama geopolítico incierto en la región del Indo-Pacífico. La falta de claridad en las políticas del próximo gobierno estadounidense aumenta la incertidumbre y la necesidad de una cooperación estrecha entre las naciones miembros de la ASEAN y sus socios internacionales para prevenir futuras escaladas de tensiones. La falta de un acuerdo sobre el código de conducta entre China y la ASEAN aumenta aún más las tensiones y la necesidad de una solución diplomática.
El futuro de la estabilidad regional dependerá, en gran medida, de la capacidad de los países involucrados para manejar sus diferencias a través del diálogo y la diplomacia, y de la respuesta que el gobierno de Trump decida ante la compleja situación de la región. El papel que jugará la ASEAN en este contexto es crucial y determinará el grado de cooperación entre ambos bloques.