Cristina Fernández de Kirchner, ex presidenta y actual titular del Partido Justicialista (PJ), inició este fin de semana una gira peronista que se proyecta como un desafío directo al gobierno de Javier Milei. Su primera parada: Santiago del Estero, donde el domingo 17 de noviembre encabezó un acto en el marco del Día del Militante.
Llegada a Santiago del Estero y recibimiento oficial
Fernández de Kirchner arribó a la provincia el sábado por la tarde, recibida por autoridades locales del PJ y funcionarios provinciales. La acompañaron los senadores nacionales Oscar Parrilli y Eduardo “Wado” de Pedro, figuras clave en el peronismo actual, lo que refuerza la importancia de este acto político como punta de lanza de una estrategia opositora en ciernes.
El recibimiento fue protocolar, con la presencia del vicegobernador Carlos Silva Neder y el presidente del PJ local, José Emilio Neder. Este despliegue de apoyo muestra la fuerza que aún ostenta el peronismo en provincias como Santiago del Estero, a pesar de la creciente influencia de las fuerzas libertarias a nivel nacional.
Acto por el Día del Militante: expectativa por el discurso
El acto en el Estadio Quimsa se convirtió en el centro de atención política del fin de semana. Organizado por el PJ provincial, y con el llamado a la participación de la CGT local desde las 17:00 horas, se esperaba una concurrencia masiva de militantes peronistas. La expectativa por el discurso de Fernández de Kirchner fue, según distintos analistas políticos, muy alta.
Se especuló sobre varios posibles temas a abordar en el discurso: la confirmación de su condena en la causa Vialidad, la decisión del gobierno de revocar su jubilación de privilegio y la pensión de Néstor Kirchner, el futuro del peronismo y la proyección de una estrategia opositora en un contexto de cambio profundo en el escenario político argentino. En su discurso, criticó duramente el modelo económico implementado por Milei.
Contexto político: la gira federal y el desafío a Milei
La visita a Santiago del Estero marca el inicio de una gira federal por parte de Cristina Fernández de Kirchner. Este movimiento es interpretado como una estrategia para reorganizar al peronismo y prepararlo para las futuras elecciones legislativas. El objetivo: recomponer la unidad interna, con un discurso duro contra el gobierno de Javier Milei y su modelo económico.
La ex presidenta ha estado realizando actos en el conurbano bonaerense en las últimas semanas, pero este acto en Santiago del Estero adquiere una significación política adicional. Es el primer acto masivo desde su designación como presidenta del PJ y ocurre tras la confirmación de su condena en la causa Vialidad, que la inhabilita a ejercer cargos públicos. A pesar de ello, su liderazgo y influencia en el peronismo siguen siendo indiscutibles.
Análisis del discurso y sus posibles repercusiones
El discurso de Fernández de Kirchner estuvo fuertemente marcado por la crítica al modelo económico de Javier Milei. La ex presidenta lo calificó de “modelo fracasado” y “ajuste brutal”. Denunció el impacto negativo de las políticas liberales de Milei en la economía argentina y apuntó con especial preocupación a las medidas de ajuste que agravan la situación de las PYMES y los sectores sociales más vulnerables.
Se espera que este acto sirva como punto de partida para la planificación estratégica del peronismo. Su discurso en Santiago del Estero, así como el resto de su gira federal, servirá para unificar al partido, revitalizar la militancia y contrarrestar la ascensión de Milei en la escena política nacional. De esta manera, Fernández de Kirchner no solo se posiciona como referente opositor, sino también como articuladora de una fuerza política en reestructuración.
El camino hacia 2025
La gira de Cristina Fernández de Kirchner por el interior del país, comenzando en Santiago del Estero, representa un movimiento político estratégico que tiene el objetivo de enfrentar el desafío que supone el gobierno de Javier Milei. La movilización de la militancia, la crítica del modelo económico y la búsqueda de unidad interna dentro del peronismo delinean el inicio de una batalla política que se proyecta hasta las próximas elecciones legislativas de 2025. El resultado de esta estrategia, todavía por verse, será crucial para definir el rumbo de la oposición y la configuración del mapa político argentino en los años venideros.