La demanda global de litio, esencial para las baterías de vehículos eléctricos y el almacenamiento de energía, está impulsando una intensa búsqueda de nuevas tecnologías de extracción. Entre ellas, la Extracción Directa de Litio (DLE) se perfila como una revolución para la industria, ofreciendo ventajas significativas en cuanto a eficiencia, costo y sostenibilidad.
La Extracción Directa de Litio (DLE): una alternativa eficiente y sostenible
A diferencia de los métodos tradicionales de extracción de litio a partir de salmueras, que implican largos períodos de evaporación solar, la DLE utiliza tecnologías innovadoras para extraer el litio directamente de la salmuera. Estos procesos pueden ser basados en intercambio iónico, adsorción o extracción por solventes, cada uno con sus particularidades y ventajas.
Una de las principales ventajas de la DLE es su capacidad para procesar salmueras con bajas concentraciones de litio, lo que abre la posibilidad de explotar recursos antes considerados no rentables. Además, la DLE reduce significativamente el tiempo de procesamiento y el consumo de agua, lo cual es crucial en regiones áridas como la Puna de Sudamérica.
Otro beneficio importante es la reducción de la huella ambiental. La evaporación solar tradicional consume enormes extensiones de terreno y puede afectar los ecosistemas locales. La DLE, con sus procesos más compactos y eficientes, minimiza este impacto.
Azul Moreno, experta en DLE y directora de Rendimiento de Procesos en Zelandez, una empresa líder en el desarrollo y aplicación de esta tecnología, destaca la importancia de evaluar las características de cada salmuera para seleccionar el proceso DLE más eficiente y rentable.
Pozos de petróleo y gas: una nueva fuente de litio
La innovación en la DLE no se limita a la mejora de los procesos en salares. La posibilidad de extraer litio de aguas residuales de pozos de petróleo y gas, ya agotados, representa una nueva y prometedora fuente del preciado mineral. Estos pozos, a menudo con altos contenidos de agua salada, podrían convertirse en una fuente de litio.
Según Moreno, grandes empresas de Oil & Gas en Estados Unidos ya están explorando esta posibilidad, utilizando DLE para extraer litio de las aguas producidas por sus pozos en declino. Esto abre una vía para la diversificación de las industrias energéticas y para la economía circular, dando nueva vida a infraestructuras existentes.
En Argentina, se han realizado pruebas en la formación Palmares en Formosa, demostrando la viabilidad de extraer litio de este tipo de fuentes. Este desarrollo es especialmente significativo considerando el gran potencial de la región en cuanto a reservas hidrocarburíferas.
El papel de Zelandez y la visión de futuro
Zelandez, con operaciones en Canadá, Bolivia, Argentina, Chile y Estados Unidos, es una empresa pionera en la aplicación de la DLE. Sus tecnologías, basadas en sensores inteligentes y herramientas de control especializadas, permiten una mayor eficiencia en la producción de litio, con menor impacto ambiental y costos reducidos.
La empresa trabaja con importantes actores de la industria, incluyendo Río Tinto, POSCO, Arcadium Lithium, Eramet, Lake Resources, Lítica, Galan y Albemarle. Este respaldo refleja la confianza en la tecnología de Zelandez y en el potencial de la DLE para transformar la industria del litio.
“Con reglas de juego claras, podemos acelerar los proyectos de litio y posicionar a Argentina como una potencia mundial en este sector” – Azul Moreno
La visión de futuro para la industria del litio en Argentina es prometedora, especialmente con la aplicación de tecnologías como la DLE. Si bien el precio actual del litio representa un desafío, la eficiencia y la sostenibilidad de la DLE la convierten en una solución clave para desbloquear recursos antes inexplotables y para asegurar la competitividad de Argentina en el mercado global.
La posibilidad de extraer litio de pozos de petróleo y gas no rentables amplía aún más las oportunidades, promoviendo la economía circular y la diversificación de la industria energética argentina. La innovación, junto con políticas claras y atractivas para la inversión, son elementos esenciales para asegurar que Argentina se convierta en un líder en la producción de litio para la transición energética mundial.