La inteligencia artificial (IA) está permeando todos los aspectos de la vida moderna, y la industria cinematográfica no es una excepción. Mientras algunos ven la IA como una herramienta con el potencial de revolucionar la creación y producción de películas, otros expresan preocupación por sus posibles efectos negativos. Dos figuras prominentes de Hollywood, Cate Blanchett y Ben Affleck, han compartido recientemente sus perspectivas contrastantes sobre el futuro del cine en la era de la IA, encendiendo un debate crucial sobre el rol de la tecnología en el arte y la sociedad.
Blanchett: La sombra de la destrucción
En una entrevista con la BBC, Cate Blanchett, ganadora de dos premios Óscar, expresó su profunda preocupación por la influencia de la IA. “He visto estos robots y coches sin conductor y no sé realmente lo que eso va a traer a las personas”, declaró la actriz. Para Blanchett, la capacidad de la IA para replicar la voz humana con tan solo unos segundos de grabación representa una amenaza no solo para los actores, sino para la autenticidad y la creatividad en general. “Si lo miras de una forma, es creatividad, pero también es increíblemente destructivo”, afirmó.
La preocupación de Blanchett se centra en la posibilidad de que la IA se utilice para manipular y distorsionar la realidad. La facilidad con la que se pueden replicar voces e imágenes plantea interrogantes sobre la veracidad de la información y la propiedad intelectual. En un mundo donde la línea entre lo real y lo artificial se desdibuja cada vez más, la actriz advierte sobre el potencial de la IA para erosionar la confianza y la autenticidad.
Olvídate de si son actores o no, si te has grabado durante tres o cuatro segundos tu voz puede ser replicada… es creatividad, pero también es increíblemente destructivo.
Affleck: El optimismo de la eficiencia
En contraste con la visión de Blanchett, Ben Affleck, también ganador de dos premios Óscar, se mostró más optimista sobre el potencial de la IA en el cine. Durante su intervención en la cumbre de inversores CNBC Delivering Alpha 2024, Affleck argumentó que la IA no reemplazará la esencia del cine, la creatividad humana y la colaboración artística. “La IA puede escribir excelentes versos imitativos que suenen isabelinos. No puede escribir a Shakespeare”, explicó.
Para Affleck, la IA se convertirá en una herramienta que facilitará los aspectos “más laboriosos y menos creativos” de la producción cinematográfica. Esto permitirá, según el actor, abaratar costos, reducir la barrera de entrada y dar voz a nuevos talentos. “Lo que la IA va a hacer es desintermediar los aspectos más laboriosos, menos creativos y más costosos de la realización cinematográfica…lo que facilitará que la gente que quiera hacer ‘Good Will Huntings’ salga a hacerla”.
Dos visiones, un futuro incierto
El debate entre Blanchett y Affleck refleja la polarización que genera la IA en la sociedad actual. Mientras algunos temen la pérdida de empleos, la manipulación de la información y la deshumanización del arte, otros ven en la IA una oportunidad para la innovación, la eficiencia y la democratización del conocimiento. En el contexto del cine, la IA ya se está utilizando para la creación de efectos especiales, la restauración de películas antiguas y la generación de guiones. Sin embargo, la pregunta fundamental sigue siendo: ¿hasta dónde llegará la influencia de la IA en la creación artística?
La respuesta, como suele suceder con las nuevas tecnologías, no es sencilla. Es probable que la IA transforme la industria cinematográfica de maneras que aún no podemos imaginar. La clave estará en encontrar un equilibrio entre el aprovechamiento de sus beneficios y la mitigación de sus riesgos. El debate entre Blanchett y Affleck nos invita a reflexionar sobre las implicaciones éticas y creativas de la IA, y a participar activamente en la construcción de un futuro donde la tecnología esté al servicio del ser humano y no al revés.
Más allá de la automatización de tareas, la IA plantea preguntas fundamentales sobre la naturaleza del arte y la creatividad. ¿Puede una máquina realmente ser creativa? ¿O simplemente imita patrones preexistentes? ¿Qué significa ser humano en un mundo donde las máquinas pueden realizar tareas que antes se consideraban exclusivas de nuestra especie? Estas son algunas de las preguntas que el cine, como reflejo de la sociedad, deberá abordar en los próximos años. La discusión entre Blanchett y Affleck es solo el comienzo de un debate mucho más amplio sobre el futuro de la humanidad en la era de la IA.
En definitiva, el futuro del cine en la era de la IA dependerá de las decisiones que tomemos hoy. Si bien es cierto que la tecnología puede ser una herramienta poderosa para la creación y la innovación, también es importante ser conscientes de sus limitaciones y posibles riesgos. El debate entre Cate Blanchett y Ben Affleck nos invita a reflexionar sobre estas cuestiones y a participar activamente en la construcción de un futuro donde la tecnología esté al servicio del arte y la humanidad.