Wall Street cerró el 2024 con una nota agridulce. Si bien el año en general fue excepcionalmente positivo, con el S&P 500 en camino de superar el 20% de ganancia por segundo año consecutivo, la última jornada del año y el lunes previo mostraron un declive que invita a la reflexión. Este comportamiento mixto del mercado genera incertidumbre sobre el futuro, especialmente considerando las proyecciones de la Reserva Federal y las posibles implicaciones políticas de la nueva administración Trump.
Un 2024 de récords con un final inesperado
A pesar del traspié del lunes, donde el Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq Composite cayeron casi un 1%, el balance anual de Wall Street es innegablemente positivo. El S&P 500 y el Dow Jones registraron ganancias superiores al 23% y 14% respectivamente, marcando el mejor desempeño desde 2021. El Nasdaq, impulsado por las empresas tecnológicas, superó el 30% de crecimiento.
Este éxito se atribuye a una combinación de factores, incluyendo la desaceleración de la inflación, un consumo robusto y un mercado laboral sólido sin llegar al recalentamiento. La reelección de Donald Trump también inyectó optimismo en los inversores, que anticipan una administración favorable a las empresas.
La incertidumbre se cierne sobre 2025
El descenso en la última semana del año, junto con las proyecciones más cautas de la Reserva Federal sobre los recortes de tasas de interés en 2025, siembran dudas sobre la continuidad del auge del mercado. La Fed, liderada por Jerome Powell, anticipa menos recortes de lo previsto inicialmente, en parte debido a las preocupaciones sobre un posible repunte de la inflación impulsado por las políticas de la administración Trump, como los aranceles y las restricciones a la inmigración.
Powell, consciente del desafío de equilibrar la independencia del banco central con las presiones políticas, ha adoptado una postura cautelosa. Si bien ha afirmado que la Fed no especulará sobre el impacto de las políticas futuras, las proyecciones revisadas del banco indican una mayor preocupación por la inflación, anticipando que se mantenga en el 2,5% en 2025, por encima de las previsiones anteriores.
El impacto en las empresas y la economía
El accidente aéreo en Corea del Sur que involucró a un Boeing 737-800 impactó negativamente en las acciones de la compañía, que cayeron más del 2,6%. Este evento subraya la volatilidad del mercado y cómo eventos inesperados pueden afectar el valor de las empresas. Por otro lado, compañías como Tesla Motors, Avago Technologies, Xpeng Inc y Li Auto Inc. también experimentaron descensos, mientras que Antero Rsrc, ST:EQTAB, Cabot Oil & Gas, Encana Corporation y Comstock Resources Inc mostraron un comportamiento positivo.
Estos movimientos en el mercado reflejan la complejidad de la economía global y cómo diferentes sectores responden a las fluctuaciones y a las noticias. La perspectiva para 2025 dependerá en gran medida de cómo las políticas de la administración Trump, las decisiones de la Reserva Federal y los eventos globales interactúen para moldear el panorama económico.
La visión de los expertos y el futuro del mercado
Analistas de Goldman Sachs prevén que la Reserva Federal realizará tres recortes en las tasas de interés de 25 puntos básicos cada uno en marzo, junio y septiembre de 2025, llevando el rango a 3.5-3.75%. Además, se espera una ralentización en la reducción del balance de la Fed a partir de enero de 2025, deteniéndose por completo en el segundo trimestre. Esta proyección contrasta con las expectativas anteriores de cuatro recortes y refleja la creciente cautela de la Fed ante la posibilidad de un aumento de la inflación.
El consenso entre los analistas es que el mercado seguirá creciendo en 2025, con una proyección de un aumento del 14,8% en el S&P 500. Sin embargo, existen voces disidentes que advierten sobre una posible sobrevaloración de las acciones y la incertidumbre en torno a las decisiones de la Fed. Algunos expertos señalan que la inflación, si resurge, podría frenar los recortes de tasas, mientras que otros advierten sobre la posibilidad de una corrección del mercado debido a la especulación excesiva. Las tensiones geopolíticas también representan un factor de riesgo que podría afectar negativamente el desempeño del mercado.
Diciembre, el peor mes para el S&P 500 y el Nasdaq desde abril, sirve como recordatorio de la volatilidad del mercado. La alta concentración de las ganancias en las “siete magníficas” acciones tecnológicas (Alphabet, Amazon, Apple, Meta, Microsoft, Nvidia y Tesla) genera preocupación sobre la sostenibilidad del crecimiento. Estas empresas, que han impulsado gran parte del rendimiento del S&P 500 en 2024, podrían ser vulnerables a una corrección del mercado.
En conclusión, Wall Street cierra un año de éxitos, pero las señales de incertidumbre son evidentes. La cautela de la Reserva Federal, las políticas de la administración Trump y la posibilidad de una corrección del mercado plantean interrogantes sobre el futuro. Los inversores deberán estar atentos a estos factores para navegar por el complejo panorama económico y financiero que se avecina en 2025. Solo el tiempo dirá si el optimismo del mercado podrá superar los desafíos que se avecinan o si la incertidumbre se materializará en una corrección significativa.