El domingo se convirtió en un día de caos y llamas en Córdoba. Un voraz incendio se desató en los galpones de Fono Bus, transformando colectivos y camionetas en un amasijo de hierros humeantes. El cielo se tiñó de naranja, y el humo se elevó sobre la ciudad. En medio de esta escena, un milagro: ni una sola vida se perdió.
Rápida Respuesta Contuvo el Incidente
A las 16:30, las alarmas rasgaron el silencio de Bajo Yapeyú. Los vecinos, acostumbrados al bullicio de los talleres de Fono Bus, fueron sorprendidos por un espectáculo aterrador. Las llamas danzaban, lamiendo las paredes del galpón y devorando todo a su paso. Una columna de humo, densa y oscura, se alzaba hacia el cielo, visible desde kilómetros. El aire olía a quemado.
Dentro del galpón, el caos era total. Unos treinta empleados intentaban desesperadamente salvar lo que podían. Las llamas avanzaban, alimentándose del combustible y los materiales inflamables. El calor era insoportable, el humo asfixiante. Cada segundo contaba.
La Llegada de los Bomberos
En minutos, cuatro dotaciones de bomberos llegaron al lugar. Los valientes bomberos se enfrentaron a las llamas con coraje. Mangueras en mano, se adentraron, luchando contra el fuego con una precisión metódica. Cada gota de agua era una victoria.
El jefe de bomberos, Sergio Clavero, dirigió las operaciones con calma. Sabía que cada segundo era crucial. Con la ayuda de dos dotaciones municipales, los bomberos lograron confinar las llamas y evitar que se propagaran.
Durante horas, la batalla fue intensa. El fuego rugía, las sirenas gritaban, y los bomberos luchaban contra el fuego. Finalmente, lograron controlar el incendio. El cielo recuperó su azul, y el humo comenzó a disiparse.
El Saldo de la Tragedia
El balance del incendio fue desolador. Dos colectivos y una camioneta de Fono Bus fueron consumidos, reducidos a cenizas. El galpón, con sus paredes ennegrecidas, era un testimonio de la furia del fuego. Las pérdidas materiales fueron cuantiosas, pero no hubo que lamentar víctimas.
“Fue un milagro”, repetían los vecinos, aliviados. La respuesta está en la rápida reacción de los empleados, que lograron evacuar el galpón, y en la valentía de los bomberos, que arriesgaron sus vidas.
Investigación en Curso
Las causas del incendio aún se desconocen. Fuentes policiales informaron que se ha iniciado una investigación para determinar qué originó las llamas. Se barajan hipótesis, desde un cortocircuito hasta un fallo en el sistema de calefacción. Los peritos trabajarán para esclarecer lo sucedido.
Mientras tanto, Fono Bus evalúa los daños y trabaja para restablecer el servicio. Los talleres de Bajo Yapeyú son fundamentales, y su reconstrucción será una tarea prioritaria. La solidaridad de los vecinos y la colaboración de las autoridades serán clave.
El incendio es una tragedia que nos recuerda la fragilidad de la vida y la importancia de la prevención. Pero también es una historia de coraje y solidaridad. En medio de las llamas, brilló la esperanza.