En Villa Allende, Córdoba, la construcción de una obra vial desató una batalla ambiental que enfrenta a vecinos decididos a preservar un imponente quebracho blanco con una antigüedad estimada entre 300 y 400 años, contra la decisión de avanzar con la obra tal como está prevista. Esta disputa no solo refleja un conflicto local, sino también una tensión cada vez mayor entre el desarrollo urbano y la protección de la naturaleza.
El Quebracho en el centro de la controversia
El majestuoso quebracho blanco, situado en la avenida Padre Lucchese, se encuentra en el camino de la duplicación de la avenida, un proyecto que conectará la autovía E-53 con la rotonda del Golfista. Para los vecinos, la tala del árbol representa una pérdida irreparable de un símbolo natural y un daño al ecosistema local. Su antigüedad y tamaño lo convierten en un ejemplar único en la zona, atesorando un valor histórico y ambiental innegable.
Ante esta amenaza, los vecinos, con el apoyo de artistas como Piñón Fijo y Doña Jovita, han organizado un cuarto abrazo simbólico al árbol. Más que una simple manifestación, el abrazo simboliza la profunda conexión de la comunidad con su patrimonio natural y la determinación de impedir su eliminación. Se prevén actividades artísticas en el evento, con la presencia de coros y grupos de danzas tradicionales.
Las propuestas y la respuesta oficial
Mara Sícoli, presidenta del Consejo Municipal de Ambiente de Villa Allende, lidera la iniciativa. La propuesta central es modificar el trazado de la obra o bien construir una rotonda (‘isla’) alrededor del quebracho, similar a lo que se observa en otros casos que han preservado árboles añejos sobre calles importantes. El trasplante, una opción planteada por las autoridades, se descarta por su alta probabilidad de fracaso debido a la edad y el sistema de raíces del quebracho blanco.
El gerente de Caminos de las Sierras, Julio Bañuelos, respondió que la solución de la ‘isla’ no está permitida por normativa vial. Si bien se encuentran analizando alternativas, argumentan que la presencia del árbol presenta un riesgo vial. La respuesta oficial generó malestar entre los vecinos que cuestionan la falta de flexibilidad y la aparente falta de peso de los argumentos ambientales. La discrepancia radica en la interpretación de las normas viales y el valor que se asigna a la preservación del árbol.
Más allá del quebracho: Un problema repetido
El caso del quebracho no es aislado. En otro punto de la ciudad, vecinos del complejo de departamentos Santo Domingo luchan por proteger un palo borracho de aproximadamente 50 años, amenazado por la administración del edificio. El relato es similar al del quebracho, intentos previos por eliminar el árbol, respuestas insatisfactorias de las autoridades. Esto subraya la dificultad en la convivencia entre la urbanización y la conservación de especies nativas.
La situación en ambos casos destaca la falta de una cultura de protección de árboles antiguos en la planificación urbana. En muchos casos, la comodidad y la velocidad de las obras prevalecen sobre la conservación del patrimonio natural, ignorando el valor histórico, ambiental y paisajístico de estos ejemplares.
Propuestas de solución y la búsqueda de un consenso
La controversia ha llegado al Concejo Deliberante, donde se han presentado distintas propuestas: desde el trasplante (desaconsejado por expertos), el rediseño de la obra, y hasta la clonación del árbol, una opción más innovadora que permitiría replicar la genética del quebracho para la plantación de nuevos ejemplares. Caminos de las Sierras ofreció la compensación de 300 plantas autóctonas, pero la comunidad exige la conservación del árbol en su lugar, considerando su valor incalculable.
Para lograr una solución viable, se necesita una mayor consideración de los aspectos ambientales en la planificación urbana. Un diálogo abierto que incluya a la comunidad, expertos y las autoridades, es fundamental. Priorizar la preservación del patrimonio natural, sin sacrificar el desarrollo, es posible si se busca alternativas innovadoras y se tiene la voluntad política necesaria.
El futuro del quebracho: ¿Triunfará la conservación?
La batalla por el quebracho es un ejemplo de una lucha cada vez más frecuente en las ciudades argentinas. La presión inmobiliaria y el ritmo acelerado de las obras muchas veces chocan con la voluntad ciudadana de preservar su patrimonio natural. El desenlace del conflicto definirá no solo el destino de este árbol icónico, sino también la importancia que se le otorga a la integración de la naturaleza en los espacios urbanos. El resultado influirá en políticas futuras y marcará un precedente en la relación entre desarrollo y preservación del medio ambiente en el país.
La movilización vecinal, acompañada por un amplio apoyo social, demuestra la creciente consciencia ciudadana sobre la importancia de la conservación. La presión social, las propuestas alternativas y la capacidad de diálogo serán claves para definir el futuro del quebracho y el mensaje que se envíe a las futuras generaciones acerca de la importancia de la convivencia entre desarrollo y la protección de la naturaleza.