En Villa Allende, Córdoba, un imponente quebracho blanco de entre 300 y 400 años se encuentra en el centro de una disputa entre vecinos y una empresa constructora a cargo de la duplicación de la Avenida Padre Lucchese. Esta emblemática planta, ubicada en cercanías de los barrios cerrados San Isidro y Chacras de la Villa, se interpone en la traza de la obra, generando una fuerte resistencia en la comunidad.
La cuarta protesta: un abrazo simbólico con apoyo artístico
Este martes, a las 18hs, se realizará la cuarta movilización vecinal para exigir la preservación del quebracho. Esta vez, la protesta se caracteriza por la inclusión de actividades artísticas para llamar la atención sobre la situación y sumar apoyo a la causa. Coros locales, grupos de danzas folclóricas y mensajes de apoyo de figuras destacadas como Piñón Fijo y Doña Jovita, prometen una jornada de concientización y resistencia pacífica.
El objetivo principal de la manifestación es concientizar a la población sobre la importancia del quebracho histórico como parte del patrimonio natural de Villa Allende y exigir una solución que no implique la eliminación de esta venerable planta. Los vecinos han logrado una considerable movilización, y este evento artístico busca amplificarla aún más. Se espera una concurrencia significativa, superando las cifras de las protestas anteriores.
Las propuestas de los vecinos y la respuesta oficial
Mara Sícoli, presidenta del Consejo Municipal de Ambiente de Villa Allende, lidera la lucha vecinal. Se plantea la necesidad urgente de encontrar alternativas viables. Los vecinos solicitan dos soluciones principales: un cambio de traza en la obra o la construcción de una ‘isla’ alrededor del árbol, similar a las implementadas para proteger otros ejemplares antiguos en la ciudad. Como ejemplo, mencionan la isla que protege a un algarrobo añejo en la avenida Sabattini o el que hay en la ruta provincial S-441 que conecta Unquillo con la E-53.
Sin embargo, la empresa provincial Caminos de las Sierras, a cargo de la obra, inicialmente descartó la opción de la ‘isla’ alegando normativa vial. A pesar de esto, no se descarta del todo su implementación. A modo de alternativa, Caminos de las Sierras sugirió como solución el trasplante del quebracho. Los vecinos, con el apoyo de ingenieros agrónomos, rechazan esta alternativa debido a la alta probabilidad de que la planta no sobreviva debido a la edad y tamaño del ejemplar, con un sistema de raíces muy extensas y profundas. La posibilidad de que el trasplante sea efectivo es casi nula.
Más allá del quebracho: la lucha por la preservación ambiental en Villa Allende
La lucha por el quebracho en Villa Allende trasciende el caso particular de un árbol; representa la necesidad de integrar consideraciones ambientales en los proyectos de infraestructura. La falta de planificación adecuada para preservar el patrimonio natural durante obras públicas es una problemática recurrente en numerosas zonas de Argentina, y Villa Allende no está exenta de ello. La decisión sobre este caso podría sentar un precedente para futuras obras en el municipio. Si se llega a un acuerdo favorable para los vecinos, ello podría servir de referencia para que, en el futuro, se prevengan estas situaciones en los planes municipales.
El debate llegó al Concejo Deliberante de Villa Allende, donde se presentaron diversas propuestas, incluyendo la reproducción genética del árbol para su posterior replantación a través de semillas obtenidas a partir de su ADN. Sin embargo, para los vecinos, la compensación ofrecida por Caminos de las Sierras –la donación de 300 plantas nativas– no es suficiente. Su deseo se centra en salvar al ejemplar histórico, un símbolo de la identidad local y del paso del tiempo.
Un caso paralelo en barrio Providencia
Un caso similar se registra en barrio Providencia, donde vecinos del complejo de departamentos Santo Domingo se movilizan para evitar la tala de un palo borracho de aproximadamente 50 años. En esta ocasión, es el consorcio de propietarios el que busca remover el árbol, generando la reacción ciudadana en defensa de la planta. Esta situación refuerza la idea de la falta de conciencia sobre la importancia del patrimonio arbóreo en los proyectos urbanos.
La situación refleja la importancia de la participación ciudadana en la toma de decisiones que afectan al medio ambiente y la necesidad de integrar en los proyectos de construcción criterios de sustentabilidad que minimicen el daño al patrimonio natural. Los vecinos siguen insistiendo en un cambio en los planes actuales para respetar el patrimonio verde de Villa Allende. La movilización continúa, generando conciencia sobre la preservación de espacios verdes y la búsqueda de soluciones que armonicen el desarrollo urbanístico con la conservación de la naturaleza.