Una tragedia conmocionó a la ciudad de Córdoba en la madrugada del lunes. El derrumbe del techo de una vivienda en el barrio Villa Inés causó la muerte de un niño de 13 años y dejó a sus dos hermanos menores gravemente heridos. La madre de los niños también resultó herida, pero fue dada de alta horas después.
El trágico derrumbe
El incidente ocurrió alrededor de la 01:25 a.m. en una casa ubicada en la calle 29 de Febrero, manzana B, casa 7. La familia, compuesta por Noemí del Valle Farnochi (45 años) y sus tres hijos, se encontraba en la cocina-comedor cuando el techo de la vivienda colapsó, aparentemente por causas aún indeterminadas. Los vecinos, alertados por el estruendo, acudieron inmediatamente al rescate.
Tras el colapso, vecinos rápidamente rescataron a la familia de entre los escombros y los trasladaron al Hospital de Pronta Atención San Jorge. Lamentablemente, el niño de 13 años, Rubén Torres, falleció en el centro médico a causa de un severo traumatismo de pecho y abdomen. La madre fue derivada luego al Hospital San Roque y dada de alta horas más tarde.
Hermanos internados en estado grave
Los otros dos hijos de la familia, Santino (10 años) e Isaías (2 años), resultaron gravemente heridos. Santino sufrió traumatismo de cráneo y espalda y fue internado en terapia intensiva del Hospital de Niños. Isaías presenta traumatismos en cráneo y hombro y una posible fractura de fémur, también se encuentra internado en el Hospital de Niños.
El estado de salud de ambos hermanos es crítico, pero según reportes oficiales, su estado se mantiene estable dentro de la gravedad de sus lesiones. Médicos especialistas continúan monitoreándolos de cerca.
Investigación y causas del derrumbe
Bomberos y personal policial se hicieron presentes en el lugar del incidente para asegurar el área, dado el peligro de nuevos derrumbes. Se interrumpió el suministro eléctrico en el domicilio para prevenir más accidentes. Las autoridades investigan las causas del colapso, que podrían estar relacionadas a las fuertes lluvias y vientos que azotaron la ciudad durante la noche.
Inspectores municipales realizarán un estudio exhaustivo de la estructura de la vivienda para determinar las causas exactas del derrumbe y evitar que tragedias similares vuelvan a ocurrir. Esto incluye un análisis de los materiales de construcción, la integridad de la estructura y la posible falta de mantenimiento.
El testimonio de los vecinos indica que la vivienda estaba en aparente mal estado, y que ya se habían reportado grietas y otros problemas estructurales en el pasado. Esta información es crucial para la investigación y para entender si hubo negligencia por parte de las autoridades o de los propietarios de la casa.
Solidaridad y apoyo a la familia
La comunidad cordobesa se encuentra conmovida por la tragedia, expresando su solidaridad y apoyo a la familia afectada. Se han lanzado diferentes iniciativas para recaudar fondos y brindar asistencia a Noemí y sus hijos. Un número telefónico se ha compartido para colaborar con la familia: 351-3234711.
Además del apoyo económico, la comunidad busca proporcionar apoyo emocional y psicológico para enfrentar esta pérdida y la dura situación que atraviesa la familia. La pérdida de un hijo es un trauma que no se supera fácilmente, y Noemí deberá enfrentar la dura recuperación de sus hijos menores y la dolorosa ausencia de Rubén.
El suceso resalta la importancia de la seguridad estructural en las viviendas, especialmente en zonas vulnerables a fenómenos climáticos. Se hace necesario un mayor control de las condiciones de habitabilidad y un plan de prevención de riesgos para evitar que tragedias como ésta vuelvan a ocurrir.
El caso pone de manifiesto la necesidad de implementar políticas públicas más efectivas para garantizar la seguridad y la integridad estructural de las viviendas en toda la provincia. La prevención es fundamental para salvar vidas y evitar el sufrimiento de las familias.
La difícil situación de la familia
Esta tragedia golpea con especial dureza a Noemí Farnochi, quien ya ha sufrido la pérdida de su esposo en julio de 2023 en un hecho de violencia. El fallecimiento de su esposo dejó a Noemí sola con sus tres hijos en la vivienda donde ocurrió el derrumbe, que pertenecía a la suegra. Ahora, debe enfrentar no solo la pérdida de uno de sus hijos sino la incertidumbre del futuro junto a sus dos hijos que siguen hospitalizados.
La familia se mudará a la casa de la madre de Noemí, buscando un espacio seguro y estable para iniciar el difícil proceso de recuperación. Sin embargo, las secuelas emocionales y la posible necesidad de reconstruir sus vidas tras esta tragedia dejará una marca imborrable en la familia.
Reflexiones sobre seguridad y prevención
La muerte del niño de 13 años sirve como una alerta sobre la vulnerabilidad de familias en situación de vulnerabilidad ante eventos climáticos y la importancia de invertir en la seguridad de las viviendas. Las fuertes lluvias que azotaron la ciudad de Córdoba en las últimas horas pusieron en evidencia las deficiencias en la infraestructura urbana.
Las autoridades deben tomar cartas en el asunto y reforzar los mecanismos de control y regulación para evitar futuras tragedias. Se necesitan planes de inspección exhaustivos, programas de mantenimiento y apoyo financiero para mejorar la seguridad estructural de las viviendas, especialmente en las zonas más vulnerables. El costo humano de la negligencia es demasiado alto.