Una tragedia sacudió la madrugada de este lunes a la ciudad de Córdoba. Una feroz tormenta provocó el derrumbe del techo de una vivienda precaria en el barrio Villa Inés, dejando como saldo un adolescente de 13 años muerto y a sus dos hermanos menores internados en estado grave. La madre, aunque con politraumatismos, se recupera fuera de peligro. El hecho ha conmocionado a la comunidad, poniendo en evidencia la vulnerabilidad de las familias que habitan en viviendas con deficiencias estructurales.
El derrumbe y el rescate desesperado
Alrededor de la 1 de la madrugada, un fuerte estruendo alertó a los vecinos del barrio Villa Inés. El techo de una vivienda ubicada en la calle 29 de febrero se había desplomado sobre sus ocupantes: Noemí Farnochi, de 45 años, y sus tres hijos, Rubén (13), Santino (10), e Isaías (2). Vecinos, con un heroísmo desgarrador, fueron los primeros en llegar al lugar y rescataron a la familia de entre los escombros, mientras la lluvia intensificaba la emergencia.
Los testimonios de los vecinos son conmovedores. “Fue durísimo ver a las criaturas sepultadas”, relató Martín, uno de los que participaron del rescate. “Escuchamos los gritos y rompimos la puerta. Sacamos a los chicos como pudimos y los llevamos al Hospital de Atención Rápida en vehículos particulares.”
En el hospital, la tragedia se confirmó: Rubén, el adolescente de 13 años, había fallecido a causa de un traumatismo severo en el pecho y abdomen, producto del aplastamiento. Su madre, Noemí, sufrió politraumatismos pero fue dada de alta horas después. Santino e Isaías, sin embargo, quedaron internados en terapia intensiva del Hospital de Niños, con pronóstico reservado. Ambos presentan traumatismos craneales, de espalda, fracturas y golpes severos en la zona abdominal.
La precariedad de la vivienda y el dolor de una madre
La casa, de pequeñas dimensiones, presentaba una estructura precaria, según confirmaron las autoridades. Tenía una losa de cemento en un sector y un techo de chapa en otro, y su estado de deterioro era evidente. “La casa tenía una losa precaria y se derrumbó con la tormenta”, informó un integrante del Grupo DUAR de la Policía de Córdoba. Las imágenes de la vivienda desplomada muestran una estructura sumamente frágil, incapaz de resistir una tormenta de lluvia.
Noemí Farnochi, devastada por la muerte de su hijo mayor, describió los dramáticos momentos del derrumbe. “Estábamos viendo televisión cuando todo se vino abajo. Pensé que era una pared”, contó. “Él me decía ‘no puedo respirar, ma’ y me pedía que abriera la puerta pero yo no podía.”
La situación de Noemí se agrava aún más al recordar que hace apenas un año perdió a su marido, víctima de una balacera entre bandas. Ahora, una nueva tragedia azota a esta familia, exponiendo la fragilidad de su situación.
El dolor de Noemí y la preocupación por la salud de sus hijos menores resuenan en la comunidad de Villa Inés. La familia ya recibió ayuda y apoyo social del municipio y la provincia, pero la magnitud de la tragedia exige un llamado a la reflexión sobre la necesidad de políticas de vivienda que garanticen la seguridad y el bienestar de las familias más vulnerables.
Investigación y consecuencias
Las autoridades locales están investigando las causas del derrumbe, aunque la precariedad de la construcción es un factor determinante. Se espera un informe pericial para determinar la responsabilidad, además se analiza la posibilidad de realizar trabajos en el barrio para evitar este tipo de eventos en el futuro.
El suceso ha generado un debate sobre la necesidad de mejorar las condiciones de vivienda en barrios vulnerables y la importancia de inspecciones periódicas en hogares de riesgo. Vecinos denuncian que hace dos años habían realizado un reclamo al gobierno municipal para que evaluara las condiciones de la vivienda y la necesidad de reformas, pero no tuvieron respuesta. La situación es un llamado a la acción para las autoridades.
La solidaridad ciudadana también ha sido un factor clave. Los vecinos, quienes rescataron a la familia entre los escombros, se han volcado a ayudar, recolectando donaciones para la familia. Para colaborar se puede contactar al teléfono 351-3234711
Esta tragedia deja un profundo dolor en la ciudad y es un recordatorio de las desigualdades sociales que impactan en la vida de cientos de familias argentinas. La muerte de Rubén y el estado crítico de sus hermanos sirven como un grito de alerta a las autoridades y un clamor por más viviendas dignas y seguros para todos.
Llamado a la solidaridad
Ante la magnitud de la tragedia y la vulnerabilidad de la familia afectada, se ha lanzado una campaña de recolección de donaciones. Se necesita asistencia económica para afrontar los gastos funerarios, gastos médicos para los niños y apoyo social para que la familia pueda reconstruir su vida. Se invita a la población a colaborar de la manera que le sea posible.