La empresa argentina Surcos, dedicada a la comercialización de insumos para el agro, se encuentra en el centro de una controversia financiera tras ser denunciada penalmente por la Comisión Nacional de Valores (CNV). La acusación se centra en un supuesto ocultamiento de información relevante a los inversores, justo antes de anunciar su incapacidad para afrontar el pago de un pagaré y la consecuente baja en su calificación crediticia. A esto se suma un embargo millonario que complica aún más el panorama para la compañía.
La Denuncia de la CNV: Engaño a Inversores
La CNV acusa a Surcos de haber emitido Obligaciones Negociables Serie XIV sin revelar información crucial sobre su situación financiera real. Esta omisión, según el organismo, habría inducido a error a los inversores, quienes desconocían la verdadera situación de la empresa al momento de adquirir los títulos. La denuncia se sustenta en el artículo 309 del Código Penal, que sanciona el engaño a inversores con penas de prisión.
Según la CNV, Surcos habría ocultado información sobre su inminente incumplimiento de pago y la baja de calificación crediticia impuesta por Fix SCR SA. Esta falta de transparencia se considera un delito grave, ya que afecta la confianza en el mercado de capitales y perjudica a los inversores que, de haber contado con la información completa, podrían haber tomado decisiones diferentes.
La Respuesta de Surcos: Defensa y Reestructuración
Ante las acusaciones, Surcos ha manifestado su intención de ejercer su derecho a la defensa. La empresa asegura haber cumplido con todos los procedimientos legales y contables en la emisión de las Obligaciones Negociables. Además, ha convocado a una reunión con sus inversores para presentar una propuesta de reestructuración integral de su deuda.
Sebastián Calvo, presidente de Surcos, ha expresado el compromiso de la compañía con la estabilidad y la búsqueda de soluciones para superar la crisis. La propuesta de reestructuración, según Calvo, se basa en principios de equidad e integralidad, buscando un acuerdo que beneficie a todos los acreedores.
La empresa ha informado que el embargo millonario decretado en su contra fue solicitado por un proveedor extranjero con quien se encontraba negociando la regularización de una deuda. Este embargo complica aún más la situación financiera de Surcos, limitando su capacidad de maniobra para afrontar sus compromisos.
El Contexto de la Crisis: Caída de Ventas y Falta de Financiamiento
La crisis financiera de Surcos se enmarca en un contexto de retracción general del mercado de insumos para el agro. La empresa ha reportado una caída del 32% en sus ventas tanto a nivel nacional como internacional durante el 2024. Esta disminución en la facturación ha dificultado el acceso a nuevas fuentes de financiamiento, agravando la situación.
Según datos de la propia empresa, el mercado de fitosanitarios en Argentina se ha contraído significativamente, pasando de US$4100 millones a US$3000 millones. En Brasil, la caída ha sido aún mayor, pasando de US$22.000 millones a US$12.000 millones. Este panorama adverso ha impactado fuertemente en las finanzas de Surcos, llevándola a la situación actual.
Procedimiento Preventivo de Crisis y el Futuro de Surcos
Para intentar superar la crisis, Surcos ha anunciado su intención de presentarse a un Procedimiento Preventivo de Crisis en el Ministerio de Trabajo. Este procedimiento busca explorar alternativas de flexibilización laboral con sus empleados, como una medida para reducir costos y reestructurar la operación de la compañía.
La presentación ante el Ministerio de Trabajo es una muestra de la voluntad de Surcos de buscar soluciones para evitar una situación más crítica. Sin embargo, el éxito de esta estrategia dependerá de la aceptación de la propuesta de reestructuración por parte de los inversores y de la capacidad de la empresa para adaptarse a las nuevas condiciones del mercado. El futuro de Surcos se encuentra en una etapa crucial, y las próximas semanas serán determinantes para definir su viabilidad.