La muerte de Jorge Navarro, trabajador del subte, por presunta exposición al asbesto ha desatado una fuerte protesta por parte de Metrodelegados, quienes anunciaron un paro total del servicio para el miércoles 20 de noviembre. La medida, que afectará a todas las líneas, busca visibilizar la problemática del asbesto en el subterráneo porteño y exigir soluciones urgentes.
El Paro y sus Implicancias
El paro se llevará a cabo de forma escalonada: las líneas A y B se detendrán de 10 a 12 horas, las líneas D y H de 12 a 14 horas y las líneas C, E, y el Premetro de 14 a 16 horas. Esta decisión impactará en miles de usuarios que utilizan diariamente el subterráneo para trasladarse en la ciudad. Las consecuencias para el transporte público serán significativas. Las demoras y la saturación del resto del sistema son problemas esperables. El sindicato explicó que la protesta es una ‘medida de autodefensa’ para obligar a actuar a las autoridades.
Según Metrodelegados, la muerte de Navarro, que integraba la lista de 107 trabajadores afectados por asbesto, pudo haberse evitado. A pesar de la prohibición de esta sustancia cancerígena en Argentina desde 2003, se denuncian años de trabajo sin la debida información sobre su presencia en el ambiente laboral. El sindicato destaca que esta problemática no es nueva y lleva reclamando soluciones desde 2018, haciendo cientos de denuncias a las autoridades y presentado un Amparo Ambiental en la justicia porteña.
Las Demandas de Metrodelegados
Las demandas principales del gremio se centran en tres puntos fundamentales. El primero es el cambio urgente de las flotas de trenes que aún contienen asbesto, haciendo especial hincapié en la línea B y la necesidad de acelerar su licitación. El segundo apela a la realización de un plan integral de desasbestización, acelerando las tareas de descontaminación existentes. Y por último, exigen la incorporación de todos los trabajadores del Subte y Premetro, incluidos los jubilados, a un programa de vigilancia médica, teniendo en cuenta el largo período de latencia que puede tener la enfermedad relacionada con la exposición al asbesto.
Andrea Salmini, Secretaria de Prensa de Metrodelegados, enfatizó la indignación y dolor del sindicato por la muerte evitable de Jorge Navarro. Enfatizó la irresponsabilidad de las autoridades, quienes se hicieron de la vista gorda durante años a pesar de la prohibición del asbesto desde 2003. Salmini demandó que se cumpla con el fallo de la Justicia y que se proceda a la desasbestización completa de la red del subte.
La Respuesta de las Empresas
Subterráneos de Buenos Aires S.E. y Emova, la empresa concesionaria del servicio, respondieron que se han realizado alrededor de 3.000 estudios de calidad de aire en diferentes puntos de la red y en los espacios de trabajo, asegurando que los resultados siempre se mantuvieron dentro de los límites establecidos por ley. Esta información fue presentada en el marco de una comisión especial creada para abordar la problemática del asbesto, donde participan también los gremios, la Agencia de Protección Ambiental (APrA), la Dirección General de Protección del Trabajo, la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (Salud), el INTI y la Defensoría del Pueblo.
Sin embargo, esta información no parece ser suficiente para apaciguar las fuertes protestas de Metrodelegados, quienes acusan a las empresas de negligencia y falta de transparencia, recalcando que el fallecimiento de su compañero Jorge Navarro es una prueba irrefutable de un problema estructural que debe ser atendido con urgencia.
Contexto: ¿Qué es el Asbesto?
El asbesto, también conocido como amianto, es un mineral fibroso utilizado durante décadas en diversas industrias debido a su resistencia. Sin embargo, la inhalación de sus fibras puede provocar graves enfermedades pulmonares como asbestosis, cáncer de pulmón y mesotelioma. La exposición ocurre a través de la inhalación de fibras que se encuentran en el aire en entornos de producción o en el interior de edificios que contienen partículas del mineral. El asbesto está prohibido en Argentina desde 2003, y esta prohibición no parece haber sido suficiente para evitar la exposición de los trabajadores del subte.
El caso de Jorge Navarro resalta la gravedad de la problemática y la necesidad de una acción inmediata. Su muerte, según Metrodelegados, demuestra la falta de aplicación efectiva de la prohibición y la necesidad de medidas de control y prevención más estrictas. El paro anunciado representa un llamado de atención urgente, no solo a las empresas responsables, sino también a las autoridades gubernamentales encargadas de velar por la seguridad y salud de los trabajadores.
El Futuro de las Negociaciones
El paro del miércoles se presenta como un punto crucial en la negociación entre Metrodelegados, Subterráneos de Buenos Aires S.E. y Emova. Las demandas del sindicato son claras y contundentes, mientras que la respuesta de las empresas hasta el momento no ha logrado aplacar la furia de los trabajadores. Las próximas horas serán cruciales para observar el desarrollo de la situación. Es esperable que las presiones se incrementen y la negociación sea clave para encontrar un consenso antes de que las consecuencias se sigan incrementando.
La presión social que ejerce el paro sobre las autoridades es innegable. Mientras se espera una respuesta oficial, la ciudadanía se mantiene a la espera de resolución del conflicto.
“El paro es una medida dolorosa, pero necesaria para exigir justicia por la muerte de nuestro compañero y para prevenir futuras tragedias. No descansaremos hasta que se garanticen las condiciones de seguridad e higiene para todos los trabajadores del subte.” – Andrea Salmini, Secretaria de Prensa de Metrodelegados
- Cambio urgente de las flotas de trenes que aún contienen asbesto.
- Realización de un plan integral de desasbestización.
- Incorporación de todos los trabajadores del Subte y Premetro, incluidos los jubilados, a un programa de vigilancia médica.