Un joven de 19 años fue hallado sin vida en el interior de un guardacostas de la Prefectura Naval Argentina amarrado en el puerto de Ingeniero White, Bahía Blanca. El descubrimiento del cuerpo, que yacía en el compartimento de almacenamiento de un bote semirrígido a bordo del buque “Prefecto Fique”, ha desatado una investigación para determinar las causas del fallecimiento y las circunstancias que rodearon el ingreso del joven a la embarcación.
El hallazgo e inicio de la investigación
El cuerpo fue encontrado por personal de Prefectura debido al fuerte olor a descomposición que emanaba del compartimento, una pequeña bodega sellada desde el exterior, ubicada en un semirrígido auxiliar a bordo del guardacostas. De acuerdo a los primeros informes, el joven, identificado por su padrastro, llevaba aproximadamente seis días fallecido en el lugar. La fiscalía federal de Bahía Blanca, a cargo de Santiago Ulpiano Martínez, ha tomado las riendas de la investigación, ordenando la intervención de la Policía Federal para evitar cualquier conflicto de interés, dado que la Prefectura está indirectamente involucrada en el caso.
El fiscal Martínez solicitó de inmediato el análisis de las grabaciones de las cámaras de seguridad del puerto. Las imágenes revelaron que el joven, un peluquero de 19 años sin antecedentes penales, ingresó solo al puerto y abordó el buque “Prefecto Fique” sin ser interceptado. En las filmaciones se observa al joven merodeando la embarcación y posteriormente ingresando al semirrígido, que se encontraba cubierto con una lona, y finalmente a la bodega donde fue encontrado. Se presume que el joven habría entrado con la intención de robar, quedando atrapado accidentalmente en la bodega sellada.
Las primeras hipótesis y el misterio de la bodega sellada
La principal hipótesis que manejan los investigadores es la muerte accidental por sofocación. La bodega donde fue hallado el cuerpo es hermética, lo que habría provocado un aumento extremo de la temperatura en su interior, dificultando la respiración y causando la muerte del joven. El cuerpo, según los informes preliminares, no presentaba signos de violencia ni traumatismos, lo que refuerza la teoría del accidente. No obstante, se esperan los resultados de la autopsia para confirmar esta hipótesis y descartar otras posibilidades.
Un aspecto crucial de la investigación se centra en determinar cómo el joven logró acceder al buque sin ser detectado y quedar atrapado en la bodega. El “Prefecto Fique”, un guardacostas de alta mar con una tripulación de 43 personas, se encontraba en puerto desde el 21 de septiembre, realizando tareas de mantenimiento. Las cámaras de seguridad no registraron la presencia de personal de Prefectura en el buque al momento del ingreso del joven, lo que plantea interrogantes sobre los protocolos de seguridad y la vigilancia en la zona portuaria. El acceso sin restricciones al buque, a pesar de contar con armamento, ha generado preocupación y podría dar lugar a una revisión de las medidas de seguridad en el puerto de Ingeniero White.
La Prefectura Naval Argentina y el Guardacostas “Prefecto Fique”
El “Prefecto Fique” es un buque guardacostas clase Halcón II, construido en 1981 en España. Con 67 metros de eslora y capacidad para transportar casi mil toneladas de carga, la embarcación se utiliza principalmente para el patrullaje de la Zona Económica Exclusiva del Mar Argentino, control de la pesca ilegal y tareas de rescate. El buque lleva el nombre del prefecto Luis Pedro Fique, el primer ciudadano argentino en establecerse en Ushuaia. Usualmente, el buque pasa 20 días en altamar y 20 días en puerto.
La Prefectura Naval Argentina, fuerza de seguridad a cargo de la seguridad marítima, fluvial y lacustre del país, ha colaborado con la investigación poniendo a disposición de la Policía Federal el buque y toda la información necesaria. El semirrígido donde fue hallado el cuerpo ha sido secuestrado para realizar pericias que determinen si existen indicios de violencia o cualquier otra evidencia relevante para el caso.
Próximos pasos en la investigación
Se espera que la autopsia revele la causa precisa de la muerte y si existen rastros de sustancias tóxicas o alguna condición preexistente que pudiera haber contribuido al fallecimiento. Los peritajes al semirrígido buscarán determinar si hubo manipulación del compartimento donde se encontró el cuerpo o cualquier otro elemento que pueda arrojar luz sobre el caso. La fiscalía continuará analizando las grabaciones de las cámaras de seguridad y recabando testimonios de personal del puerto y de la Prefectura para reconstruir los hechos y esclarecer las circunstancias que rodearon la muerte del joven.
Este trágico suceso ha conmocionado a la comunidad de Bahía Blanca y ha generado interrogantes sobre la seguridad en la zona portuaria. La investigación en curso busca determinar con exactitud qué sucedió en el interior del guardacostas “Prefecto Fique” y si se podrían haber tomado medidas para prevenir esta muerte.