El presidente francés, Emmanuel Macron, realizó una visita relámpago a Buenos Aires, donde se reunió con su par argentino, Javier Milei, en la Casa Rosada. Este encuentro, que tuvo lugar el domingo previo a la cumbre del G20 en Río de Janeiro, se presenta como un hecho relevante en el contexto de las relaciones internacionales y la política argentina.
El encuentro en Casa Rosada: detalles de la reunión
Macron, acompañado de su esposa Brigitte, arribó a la Casa Rosada poco antes de las 11 de la mañana. Allí fue recibido por Milei y su hermana Karina, secretaria general de la Presidencia. Tras los saludos protocolares, ambos mandatarios mantuvieron un encuentro a solas en el despacho presidencial, que duró poco más de una hora. Posteriormente, se sumaron ministros del Gabinete argentino y miembros de la comitiva francesa para una reunión ampliada.
Si bien no se dieron a conocer detalles específicos de la conversación entre ambos líderes, se sabe que el objetivo principal de Macron era acercar al presidente Milei a las prioridades del G20. La reunión permitió un diálogo previo a las deliberaciones del foro internacional, donde ambos países estarán representados.
El contexto de la visita: homenajes y agenda apretada
Antes de dirigirse a la Casa Rosada, Macron y su esposa visitaron la Iglesia de la Santa Cruz, en el barrio de San Cristóbal, para rendir homenaje a las víctimas francesas de la última dictadura militar argentina, entre ellas las monjas Alice Domon y Léonie Duquet. Este gesto simbólico refleja la importancia de la memoria histórica en las relaciones bilaterales.
El presidente francés tenía una agenda apretada en Buenos Aires. Luego de su encuentro con Milei, se reunió con inversores argentinos en la misma Casa Rosada. A las 14.30 horas, Macron emprendió su viaje a Río de Janeiro para participar en el G20, donde también estará presente Milei, aunque sin bilateral prevista con el mandatario brasileño, Lula da Silva.
Implicaciones internacionales y relaciones bilaterales
La reunión entre Macron y Milei adquiere relevancia considerando las diferencias ideológicas entre ambos líderes. Sin embargo, Francia y Argentina mantienen buenas relaciones diplomáticas, en parte gracias al trabajo del embajador argentino en París, Ian Sielecki, quien colaboró en la campaña presidencial de Macron. La reunión, además, marca el debut de Gerardo Werthein como canciller en una cumbre bilateral.
Esta cumbre bilateral se inscribe en un contexto internacional complejo y de tensiones geopolíticas, donde la búsqueda de acuerdos y consenso entre países con diferentes visiones políticas es fundamental. La visita de Macron, corta pero simbólica, puede ser un paso importante en la articulación de posturas previas al G20.
Encuentros futuros: agenda de Milei
Tras su reunión con Macron, Milei se prepara para otro encuentro significativo: el próximo martes, después de la cumbre del G20, recibirá a la primera ministra italiana Giorgia Meloni en Casa Rosada. El buen vínculo entre Milei y Meloni es un dato a tener en cuenta en el desarrollo de la política exterior argentina en los próximos meses.
El corto tiempo de estadía de Macron en Buenos Aires resalta la importancia de esta reunión bilateral en la agenda del mandatario francés y el acercamiento previo al G20, donde los desafíos globales requieren de diálogo y acuerdos, aún entre líderes con posiciones ideológicas distintas. El tiempo dirá cuál es el impacto concreto de esta cumbre en las relaciones franco-argentinas.