La Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo (FADU) de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) se ha convertido en un referente en innovación educativa al integrar la Inteligencia Artificial (IA) en sus cátedras. Un equipo de docentes ha sido galardonado internacionalmente por su proyecto “Inteligencia Artificial para la generación de nuevos modelos formales”, demostrando cómo la IA puede potenciar la creatividad de los estudiantes sin reemplazar la formación disciplinar esencial en la arquitectura.
Un premio a la innovación educativa
El proyecto de las arquitectas María Georgina Bredanini, Victoria Acevedo Vacherand y María Soledad Bustamante obtuvo el segundo puesto en el Premio Interamericano en Modelos Educativos Innovadores en Educación Superior, otorgado por la Organización Universitaria Interamericana (OUI-IOHE). Este reconocimiento destaca la importancia de la integración de la IA en la educación superior y la capacidad de la FADU para adaptarse a las nuevas tecnologías en la formación de arquitectos.
La iniciativa se centra en la cátedra de Morfología II, donde tradicionalmente se utilizaban métodos analógicos como el dibujo a mano alzada, modelos y maquetas para el estudio de las formas. La introducción de herramientas de IA generativas ha permitido a los estudiantes explorar nuevas posibilidades creativas y ampliar su universo de opciones para el desarrollo de proyectos.
La IA como potenciadora del proceso creativo
La IA no busca reemplazar la creatividad humana, sino potenciarla. Las herramientas de IA generativas, como Chat GPT y otras plataformas de modelado 3D, se utilizan como un insumo más en el proceso de diseño. Los estudiantes pueden ingresar prompts, imágenes o croquis, y la IA genera una multiplicidad de opciones que sirven como punto de partida para la exploración formal y la toma de decisiones.
Este enfoque híbrido, que combina métodos tradicionales con tecnología de vanguardia, permite a los estudiantes experimentar con diferentes posibilidades y desarrollar un pensamiento proyectual más complejo. La IA facilita la ideación y la exploración de formas, especialmente para aquellos estudiantes con menos habilidades en el dibujo a mano alzada, permitiéndoles visualizar sus ideas de manera más eficiente.
“El uso de estas IA ha potenciado la creatividad de los estudiantes, los ayuda a salir de la caja y les facilita
a quienes no son tan hábiles en el dibujo a mano alzada, por ejemplo, cargar sus propios croquis en la IA y
así han podido desarrollar proyectos complejos”, indica Victoria Acevedo
El rol del docente como curador de la IA
Si bien la IA ofrece un amplio abanico de posibilidades, es fundamental que el estudiante tenga la capacidad de discernir y seleccionar las opciones más adecuadas para su proyecto. La formación disciplinar en arquitectura sigue siendo crucial para comprender las variables espaciales, sociales, culturales y simbólicas que intervienen en el diseño de un proyecto.
El docente adquiere un nuevo rol como “curador” de los resultados generados por la IA. Su experiencia y conocimiento son esenciales para guiar a los estudiantes en el proceso de selección, análisis y adaptación de las propuestas generadas por la tecnología, asegurando que el proyecto final cumpla con los requisitos arquitectónicos y conceptuales.
“Se necesita tener la formación específica en la disciplina para poder decidir sobre los resultados”, comenta Soledad Bustamante.
El futuro de la arquitectura y la educación
La integración de la IA en la enseñanza de la arquitectura no solo amplía las posibilidades creativas de los estudiantes, sino que también los prepara para un futuro profesional en el que la tecnología desempeñará un papel cada vez más importante. La FADU, con su enfoque innovador, se posiciona a la vanguardia de la educación arquitectónica, formando profesionales capaces de utilizar la IA como una herramienta para el diseño y la construcción de un mundo mejor.
La experiencia de la FADU-UNL demuestra que la IA puede ser una herramienta poderosa en la educación, siempre y cuando se utilice de manera responsable y se complemente con una sólida formación disciplinar. El futuro de la arquitectura se vislumbra como una fusión entre la creatividad humana y la potencia de la IA, y la FADU está liderando el camino hacia esa nueva era.