La eliminación del programa Procrear por parte del gobierno de Javier Milei ha generado una fuerte controversia en Argentina, desatando una batalla política entre el oficialismo y la oposición. El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se posicionó como uno de los principales críticos, atacando la decisión del gobierno nacional y acusándolo de quitarle derechos a la población.
Las críticas de Kicillof
Kicillof utilizó su cuenta de X (antes Twitter) para expresar su enojo. En un mensaje que acompañó con imágenes de familias beneficiarias del programa, el gobernador afirmó que el gobierno de Milei “festeja cada vez que le quita derechos al pueblo”. Calificó al Procrear como uno de los planes de crédito para vivienda “más exitoso y virtuoso”, resaltando que permitió a más de medio millón de familias acceder a la casa propia o realizar mejoras en sus hogares.
Además, Kicillof cuestionó el estado actual de miles de viviendas en construcción que, según él, quedarían abandonadas a causa de esta decisión. Finalizó su crítica asegurando que el gobierno actual solo gobierna para los que más tienen.
La postura del gobierno de Milei
Por su parte, el vocero presidencial, Manuel Adorni, explicó las razones detrás de la eliminación del Procrear. Argumentó que, a lo largo de sus más de diez años de existencia, el programa tuvo un impacto negativo, ya que, según la administración Milei, construyó viviendas demasiado costosas y solo benefició a una minoría de la población, sin seguir un criterio “federal”.
- Adorni señaló una concentración del 30% de las viviendas en los municipios de Avellaneda, Berazategui y Lomas de Zamora, en un país tan extenso como Argentina.
- Criticó la lentitud en la ejecución de las obras, con un promedio de finalización de 40 meses, cuando proyectos similares demoran alrededor de 12 meses.
- Afirmó que las obras en ejecución serán liquidadas para permitir que la gente las compre mediante un sistema crediticio privado.
- Adorni destaca el retorno del crédito hipotecario privado y que esto evidencia que el acceso a vivienda no requiere la “intromisión tosca” del Estado.
Desde el gobierno se ha enfatizado que quienes ya cuentan con un crédito Procrear seguirán pagando su cuota a través del Banco Hipotecario. El argumento central es que el “sueño de la casa propia” no debería estar sujeto a la intervención estatal, sino impulsado por el libre mercado. Para respaldar esta posición, se ha mencionado la gran cantidad de solicitudes recibidas por el Banco Nación tras la reactivación de créditos hipotecarios en el sector privado.
El contexto del programa Procrear
Creado por decreto en 2012 durante el segundo mandato de Cristina Fernández de Kirchner, Procrear se diseñó para facilitar el acceso a la vivienda para la población de ingresos medios y bajos a través de créditos hipotecarios. El programa fue relanzado en 2020 bajo la gestión de Alberto Fernández con 9 líneas de crédito para construcción, refacción y ampliación de viviendas. En su momento, se celebró como un programa que ayudaba a cumplir el sueño de miles de familias argentinas.
La decisión del actual gobierno de eliminar este plan ha generado un fuerte debate acerca del rol del Estado en la política de vivienda. Mientras que los críticos argumentan que esto afecta negativamente a las clases medias y bajas, los defensores del cambio aseguran que el sector privado puede ser más eficiente en la gestión de estos créditos y la construcción de viviendas.
Implicaciones y futuro del acceso a la vivienda
La eliminación de Procrear no solo genera un debate político, sino que también plantea interrogantes sobre el acceso a la vivienda para sectores de bajos y medios ingresos en Argentina. La capacidad del mercado privado para satisfacer la demanda existente y el futuro del financiamiento hipotecario son puntos claves a considerar. El gobierno deberá demostrar la viabilidad de su nueva estrategia en materia de vivienda, ya que su éxito o fracaso determinará el impacto real de esta controversial decisión en la población.
Queda por ver si el gobierno podrá efectivamente impulsar un crecimiento en el acceso a la vivienda a través del mercado privado, compensando la pérdida de apoyo estatal. Este proceso de transición resultará en la construcción de casas de valor para quienes aspiran a tener una propiedad, y sus consecuencias serán determinantes en el debate social y político de los próximos años.
Un debate necesario
La confrontación entre Kicillof y Milei por la eliminación del Procrear resalta un debate fundamental acerca del rol del Estado en la economía y el acceso a derechos sociales básicos, como la vivienda. La argumentación de ambos lados pone en relieve las complejidades de la situación, lo que genera un escenario con diversas consecuencias a evaluar en el largo plazo. El tiempo y los hechos se encargarán de determinar si la decisión gubernamental beneficiará, o perjudicará, al pueblo argentino.