El Gobierno argentino ha anunciado cambios significativos en las regulaciones de importación, generando expectativas sobre el precio final de productos tecnológicos, como el iPhone 16, comprados desde el exterior. A partir de diciembre, un nuevo esquema arancelario entrará en vigor, modificando los costos para los consumidores.
El Nuevo Esquema de Importaciones
Las modificaciones más destacadas son la eliminación de aranceles de importación para bienes de hasta 400 dólares por envío y un aumento del límite permitido para el régimen courier, pasando de 1.000 a 3.000 dólares. Esto promete una reducción significativa en los precios de productos electrónicos importados, siempre y cuando no superen los límites estipulados.
Con este cambio de política, el Gobierno busca alinear su sistema de importaciones con otros países de la región, facilitando el acceso a bienes y servicios que, hasta ahora, se veían muy afectados por altos costos impositivos. Sin embargo, las restricciones deben ser consideradas a la hora de realizar las compras.
Calculando el precio del iPhone 16
Para un iPhone 16 de 128 GB, que se vende en aproximadamente 829 dólares en la tienda oficial de Apple, el cálculo se realiza de la siguiente manera: los primeros 400 dólares quedan exentos de aranceles, tributando solo el 21% de IVA (alrededor de 84 dólares). Los restantes 429 dólares están sujetos a un 38% de aranceles y el 21% de IVA.
Aplicando estos cálculos, el costo final del iPhone 16 sería de aproximadamente 1.200 dólares, excluyendo el costo del envío. Esto significa un aumento del 44% en comparación con el precio original de venta en el exterior. Cabe destacar que este costo sigue siendo menor al precio promedio que se puede encontrar en el mercado argentino, lo que representa una alternativa significativa.
Comparativa con el Precio Local
Si se compara el costo final estimado del iPhone 16 importado (1200 dólares) con el precio local, que puede variar entre 1.318 dólares MEP o más dependiendo de donde se realice la compra, se observa una diferencia pequeña pero relevante, especialmente al considerar los ahorros potenciales.
Sin embargo, hay que considerar que el mercado argentino varía constantemente por lo que los costos pueden cambiar considerablemente a partir de diciembre.
Otros productos tecnológicos
Este nuevo sistema también impactará en el precio de otros productos electrónicos. Por ejemplo, una tablet Samsung Galaxy A9+ que cueste 256 dólares en el exterior, costaría aproximadamente 282.370 pesos al cambio MEP, menor a los 500.000 pesos que cuesta actualmente. Un celular Samsung A35 de 128 GB podría costar alrededor de 443.000 pesos al cambio MEP, frente a los 740.000 pesos del mercado local.
Las consolas de videojuegos también se verán afectadas, una Playstation 5 tendría un costo de 445 dólares en el exterior contra los 1.040 dólares que cuesta actualmente. Esta variación es considerable.
Consideraciones Adicionales
Es fundamental considerar los costos de envío, que pueden aumentar significativamente el precio final dependiendo del origen y el servicio de courier seleccionado. El plazo de entrega también podría variar. Se debe tener en cuenta que solo se permite un máximo de 5 envíos por año por persona, y este límite se debe considerar al hacer compras.
Las nuevas medidas pretenden promover la competitividad en el mercado interno y fomentar el crecimiento de pequeñas y medianas empresas argentinas, que podrán importar insumos y componentes con mayor facilidad. Estas acciones pueden traer como beneficio productos más accesibles para el consumidor común, pero de igual manera, se deben considerar las diferentes restricciones que esta modificación trae.
La reforma arancelaria representa un cambio importante en el panorama de las importaciones a Argentina. Si bien facilita el acceso a productos electrónicos a precios más competitivos, es esencial analizar cuidadosamente cada caso particular, considerando los costos adicionales y las limitaciones del sistema para tomar una decisión informada. La combinación del costo del producto, los impuestos, los costos de envío, y las restricciones aplicables determina la conveniencia real de comprar desde el exterior. Más aún, con las fluctuaciones del mercado argentino, los ahorros se podrían ver considerablemente alterados.