Ignacio Piergallini Mazzola, un joven de 25 años egresado del Colegio Nuestra Señora del Huerto de Pergamino, ha alcanzado un logro excepcional al obtener el mejor promedio de la carrera de Bioquímica en la Universidad Nacional de Rosario (UNR) en 2023. Su dedicación y pasión por las ciencias naturales lo han llevado a destacarse en el ámbito académico y a embarcarse en un prometedor camino en la investigación científica.
Un camino marcado por la perseverancia y el amor por la ciencia
Desde temprana edad, Ignacio mostró un gran interés por las ciencias naturales, especialmente por la química y la biología. Esta inclinación lo llevó a elegir la carrera de Bioquímica, una disciplina que describe como “amplia” y que le permite explorar tanto el área de la salud como la investigación. Su promedio de 8.80 no es fruto de la casualidad, sino del esfuerzo constante y la dedicación que ha demostrado a lo largo de su carrera.
Para Ignacio, el aprendizaje siempre fue el principal motor de su esfuerzo. “Mi objetivo fue aprender y reflejar el esfuerzo en los resultados”, afirma. Su método de estudio se basó en la constancia y la anticipación, evitando dejar las tareas para último momento. “Nunca hice las cosas sobre la hora; eso me ayudó a generar hábitos sólidos”, comenta. Aunque reconoce que no todos sus hábitos fueron saludables, la disciplina y la organización fueron claves para su éxito académico.
Superando desafíos y encontrando inspiración en la Química Biológica
A pesar de su dedicación, Ignacio también enfrentó desafíos en su camino. Recuerda el primer año de la carrera como el más difícil, debido a la incertidumbre inicial y la necesidad de adaptarse al ritmo universitario. Sin embargo, la aprobación de su primer examen final fue un punto de inflexión que le dio la confianza para continuar. “Aprobar el primer final fue un momento clave; me hizo pensar que podía con los demás”, recuerda.
Entre las materias que cursó, destaca Química Biológica como su favorita, no solo por el contenido, sino también por el ambiente de trabajo colaborativo y el apoyo de la cátedra. Recuerda con gratitud a profesores como Ariel Sarotti, de Química Orgánica, y Gustavo Mancuso, de Física I y II, quienes con su enfoque didáctico y sus explicaciones claras, facilitaron su aprendizaje.
El apoyo familiar: un pilar fundamental
El reconocimiento al mejor promedio no solo llenó de orgullo a Ignacio, sino también a su familia. “Se pusieron muy felices, tanto mis padres como mi hermano”, comparte. Reconoce el apoyo incondicional que recibió de ellos, que le permitió dedicarse plenamente a sus estudios y alcanzar sus metas. “Este mérito no es solo mío sino también de mi familia que me bancó desde el primer momento”, afirma con gratitud.
Un futuro en la investigación: el camino elegido
Actualmente, Ignacio es becario en el Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario (IBR), donde colabora en el proyecto “Fisiología Molecular de Cultivos” bajo la dirección de la doctora María Inés Zanor. Su pasión por la investigación lo ha llevado a optar por un doctorado en el área de biología vegetal, un camino que le demandará cuatro años más de estudio y dedicación. “Probé con el área de salud pero ahora estoy realizando tareas de investigación en el IBR de Rosario donde me estoy dedicando al trabajo con plantas ya que estoy haciendo un doctorado sobre ello”, comentó el joven.
Con una beca que le permite financiar sus estudios de doctorado, Ignacio se enfoca en el presente, pero también mira hacia el futuro con ambición y determinación. Una vez finalizada su tesis doctoral, evaluará sus opciones, ya sea continuar en la investigación o explorar otros campos dentro de la bioquímica. Su objetivo a largo plazo es claro: trabajar en la investigación científica en Argentina, generar un impacto positivo en la sociedad y buscar oportunidades internacionales para seguir creciendo profesionalmente. “Luego de la presentación de la tesis veré cómo continúo, si sigo por el lado de la investigación u otro rubro dentro de la misma carrera”, relató Piergallini quien desde los 18 años está instalado en Rosario.
Un mensaje inspirador para los futuros científicos
La historia de Ignacio es un ejemplo inspirador para los estudiantes que se inician en la carrera científica. Su mensaje es claro: la persistencia, la constancia y el amor por el conocimiento son las claves para alcanzar el éxito. “No dejen que los primeros resultados pongan en duda su decisión”, aconseja. “Con el tiempo, los temas se vuelven más afines a lo que elegimos, y también se aprende a estudiar y rendir mejor. La persistencia y la constancia son fundamentales”.
Su experiencia demuestra que las dificultades iniciales son superables y que la pasión por la ciencia puede llevar a alcanzar grandes logros. Ignacio Piergallini Mazzola, el mejor promedio de Bioquímica 2023 de la UNR, no solo ha demostrado excelencia académica, sino también un compromiso con la investigación y un futuro prometedor en el campo científico. Su historia inspira a las nuevas generaciones a perseguir sus sueños con determinación y a no rendirse ante los desafíos.