La ciudad de Alta Gracia se encuentra conmocionada por una investigación en curso por presuntas estafas con criptomonedas. La justicia ya ha iniciado las indagatorias a los acusados, entre ellos, el líder de la Fundación Dream Team, Pablo Díaz Mussi, quien se encuentra detenido. Hasta el momento se han registrado más de 80 denuncias de supuestos damnificados, quienes habrían sido víctimas de una estafa piramidal.
El Origen de la Investigación
La investigación comenzó a partir de la difusión de fotografías de una gala organizada por Knigth Consortium en San Pedro, Buenos Aires. Esta plataforma prometía ganancias exorbitantes en criptomonedas a sus usuarios, actuando como asesora en sus inversiones. Sin embargo, la gala resultó ser una puesta en escena, con la participación incluso de actores polacos, incluyendo a un individuo que se hacía llamar “Timothy” y se presentaba como director de marketing.
Las redes sociales jugaron un papel crucial en la denuncia de esta posible estafa. Se descubrió que varios “capitanes” de asesoramiento en criptomonedas de Alta Gracia habían participado de la gala, generando sospechas de su implicación en una estafa piramidal. Lo que comenzó como un rumor en las redes, rápidamente se tradujo en denuncias formales.
Dream Team: La Pata Local
En Alta Gracia, la Fundación Dream Team actuaba como brazo local de esta operación. A través de una plataforma virtual en Telegram, una mujer conocida como “China” asesoraba a los usuarios en la compra de criptomonedas. La existencia misma de estas criptomonedas es actualmente parte de la investigación.
Para participar en esta supuesta pirámide, los inversores arriesgaban sumas importantes: entre $50.000 y $100.000 pesos, en algunos casos llegando incluso a la venta de vehículos o la solicitud de préstamos millonarios. La promesa de una ganancia diaria entre 1% y 3% en dólares sobre la inversión en pesos era demasiado atractiva como para ser verdadera.
Un detalle que llama la atención es que algunos denunciantes señalan que debían dejar un 5% de sus ganancias, supuestamente destinado a ayudar a merenderos o comedores comunitarios. Este aspecto agrega una capa de complejidad a la investigación, que busca determinar si se trató de una excusa para justificar el movimiento de fondos o una maniobra real, aunque cuestionable, de filantropía.
La Investigación en Curso
La magnitud del caso, con un potencial de miles de afectados y las complejidades técnicas involucradas en las plataformas online utilizadas, ha requerido la colaboración de equipos especializados en informática y la Unidad de Cibercrimen de la Policía Judicial. La Fiscalía del Turno I está trabajando arduamente para recopilar toda la información posible.
Se están tomando testimonios tanto de las víctimas directas como de testigos que pudieron observar la forma de operar de la organización. Esta tarea requiere un análisis meticuloso de la documentación digital e informes financieros, para intentar reconstruir el flujo de fondos y determinar el destino del dinero de los inversores.
El Fin de la Pirámide y las Investigaciones
Una vez transcurrido el plazo prometido por los “capitanes” para la devolución de las inversiones, la plataforma dejó de funcionar, dejando a los inversores sin sus fondos. Ironía del destino, días antes de la fecha límite, se les solicitaba una nueva inversión de USD 88 para supuestamente recuperar su capital inicial.
Paralelamente, algunos de los responsables de la Fundación Dream Team se presentaron espontáneamente ante la Fiscalía, argumentando que también eran víctimas de la estafa. Esta situación, usual en las pirámides, requiere una investigación exhaustiva para discernir si se trata de una táctica para evadir responsabilidades o si realmente fueron víctimas colaterales.
Las investigaciones continúan bajo un estricto secreto de sumario. Las autoridades trabajan para determinar el alcance total de la estafa, identificar a todos los responsables y llevarlos ante la justicia. La cantidad de personas afectadas y el monto del dinero perdido aún no están plenamente determinados, pero la situación es preocupante.
Este caso sirve como advertencia sobre los riesgos de invertir en plataformas de criptomonedas sin la debida diligencia. La promesa de ganancias rápidas y fáciles suele ser un indicativo de posibles estafas. Es fundamental realizar investigaciones previas antes de realizar cualquier tipo de inversión y desconfiar de las promesas demasiado buenas para ser ciertas.