La escasez de pesos en Argentina está generando un impacto significativo en las empresas, especialmente en aquellas con actividad exportadora. Las demoras en la devolución del IVA y los reintegros de exportación están afectando el flujo de caja de muchas compañías, generando incertidumbre y preocupación.
Demoras en las Devoluciones del IVA
El principal problema radica en las demoras en el pago de los créditos fiscales del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a las empresas exportadoras. Según reportes de la prensa y ejecutivos de empresas cordobesas, la demora en la devolución de estos créditos fiscales se ha extendido significativamente, llegando en algunos casos a más de 60 días. Esto genera un gran impacto en su flujo de caja.
La situación es heterogénea. Mientras algunas empresas reportan dificultades financieras severas, otras parecen no experimentar estos inconvenientes. Esta disparidad se explica por las diferencias en tamaño, estructura interna, capacidad de negociación y su familiaridad con los procesos burocráticos. Mientras algunas PYMEs aguardan devoluciones de $150 o $200 millones de pesos, lo que resulta fundamental para la operatividad, otras empresas de mayor envergadura han reportado ausencia de problemas en los plazos de pago.
Reintegros a la Exportación: Un Sistema Complejo
Los reintegros a la exportación constituyen otro mecanismo que se ha visto afectado por estas demoras. El régimen, que tiene por objeto restituir total o parcialmente los impuestos internos abonados por la mercadería exportada, funciona a través de transferencias bancarias a cuentas habilitadas por el exportador. El proceso, aunque está reglamentado, en la actualidad puede verse dificultado por las limitaciones presupuestarias y los cambios administrativos.
La complejidad del sistema, junto con los cambios administrativos recientes, ha contribuido a ralentizar los pagos. El cierre de la AFIP y la creación de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) han generado una reorganización interna que, aunque necesaria, ha introducido retrasos y dificultades en la operatividad general. En otras palabras, el proceso de gestión y el tiempo de resolución están demorados.
El Contexto Económico: Escasez de Pesos
La actual escasez de pesos en el mercado es otro factor clave que exacerba los problemas. Con el alto valor del dinero en el mercado financiero y la creciente presión de los costos en pesos, las empresas necesitan liquidez para afrontar sus compromisos financieros. Las demoras en la devolución del IVA y reintegros de exportaciones agravan la dificultad para mantener el flujo de caja, limitando así la capacidad de pago de sueldos, adquisición de materia prima y, en definitiva, el buen funcionamiento general.
La falta de pesos y la imposibilidad de acceder al dinero de las devoluciones de IVA significan una presión adicional sobre las empresas exportadoras. Las compañías se enfrentan a la disyuntiva de incluir en los precios de sus productos una parte del IVA que deberían recuperar, con el consiguiente impacto en su competitividad en el mercado internacional. El flujo de caja es crucial para el cumplimiento de las obligaciones de fin de año, incluyendo los pagos de aguinaldos.
Diferentes Experiencias, Mismas Consecuencias
La realidad en las empresas exportadoras es diversa. Algunas, con una estructura interna más ágil y con un historial consolidado en la presentación de documentos, logran completar el proceso de devolución del IVA en 60 días, que es considerado un plazo excelente en este contexto. Sin embargo, otras empresas, sobre todo PyMEs, enfrentan dificultades importantes en la gestión de estos procesos, con retrasos mucho más prolongados.
Esta diferencia en la experiencia pone en evidencia la necesidad de simplificar los trámites y de mejorar la eficiencia de los procesos administrativos. La incertidumbre sobre los plazos de pago y la falta de transparencia en el sistema crean una sensación de indefensión, lo cual perjudica el desarrollo de las empresas y la inversión extranjera directa. La problemática pone de manifiesto la necesidad de un sistema que priorice la eficiencia y la transparencia en la devolución de impuestos para impulsar el desarrollo del sector exportador.
Un Problema que Requiere Soluciones Urgentes
Las demoras en las devoluciones del IVA y los reintegros de exportación representan un serio obstáculo para las empresas argentinas, especialmente para las PyMEs. La escasez de pesos, la complejidad del sistema y los cambios administrativos recientes han contribuido a agravar la situación. La solución exige una acción conjunta entre el sector público y el privado que permita asegurar un flujo de caja estable y transparente, así como la creación de procesos más eficientes para las devoluciones.
Se requieren esfuerzos para mejorar la transparencia y la eficiencia del sistema de devoluciones de IVA y reintegros de exportaciones, permitiendo a las empresas planificar su actividad de manera efectiva, invertir, crecer y crear nuevos puestos de trabajo. Para ello, se deberían implementar mecanismos para acortar los plazos de pago, optimizar los trámites y brindar mayor claridad a las empresas sobre las etapas del proceso. La generación de entornos predecibles y transparentes son cruciales para una estabilidad económica y la salud del sector productivo.