El dólar blue se desploma: ¿oportunidad única o espejismo financiero? Descubra cómo este descenso impacta su bolsillo y qué esperar del futuro cambiario en Argentina.
Desde la eliminación del cepo cambiario, el dólar ha experimentado una notable baja, generando alivio y expectativas. Pero, ¿es sostenible esta tendencia? ¿Cómo afecta a los argentinos de a pie? Acompáñenos en este análisis donde desentrañaremos los factores clave y las posibles consecuencias de este fenómeno económico.
Contexto actual: El dólar en retroceso
La decisión del gobierno de Javier Milei de levantar el cepo cambiario marcó un antes y un después en el mercado de divisas. Contrario a las predicciones, el dólar no se disparó, sino que inició un descenso. El dólar bolsa (MEP) y el contado con liquidación (CCL) han disminuido, reduciendo las brechas cambiarias a mínimos históricos. El dólar oficial también ha experimentado una caída, acercándose a valores previos a la flexibilización del cepo.
Según Wise Capital, esta baja se debe a un exceso de oferta en el mercado y a la política del Banco Central de no intervenir hasta que el dólar alcance el piso de la banda de flotación ($1.000). A esto se suma la liquidación de exportaciones del sector agropecuario y la suspensión de la operatoria de pases activos, que impulsó las tasas de interés.
Manuel Adorni, vocero presidencial, celebró que algunas empresas, como Volkswagen y Molinos, hayan revertido aumentos de precios ante esta situación. El Fondo Monetario Internacional también ha mostrado optimismo, elevando la proyección de crecimiento del PBI argentino. Para dimensionar el impacto, considere que una familia promedio podría ahorrar hasta un 10% en la compra de electrodomésticos importados si el dólar se mantiene en estos niveles.
Factores que impulsan la baja del dólar
La baja del dólar no es un hecho aislado, sino el resultado de una serie de factores interrelacionados. Entre los más importantes, destacan:
- La liquidación de la cosecha gruesa: El campo argentino está vendiendo sus productos al exterior, generando un importante ingreso de divisas que presiona a la baja el tipo de cambio.
- La política del BCRA: Al no intervenir hasta que el dólar toque el piso de la banda de flotación, el BCRA permite que la oferta y la demanda determinen el valor de la divisa.
- El desarme de posiciones de carry trade: Muchos inversores están deshaciendo sus posiciones en pesos para comprar dólares, lo que contribuye a la baja del tipo de cambio.
Mariano Ricciardi, CEO de BDI Consultora de Inversiones, proyecta que el dólar se estabilizará cerca de $1.100 y podría incluso bajar hasta los $1.000 en los próximos tres meses, impulsado por la liquidación de la cosecha y la emisión del nuevo Bopreal 4. Elena Alonso, CEO de Emerald Capital, coincide en que el dólar puede seguir bajando, especialmente por el desarme de posiciones de carry trade.
Perspectivas a futuro: ¿Qué esperar?
Si bien la baja del dólar es una buena noticia en el corto plazo, es fundamental analizar qué puede suceder en el futuro. Salvador Di Stéfano, economista, señala que el dólar ha dejado de ser el “objeto de deseo” y recomienda pensar en pesos. Sin embargo, advierte que el dólar futuro posición abril 2025 se ubica en valores inferiores al dólar mayorista actual, lo que implica la posibilidad de que siga bajando.
Iván Vizental, líder de estrategia de Quinto Inversiones, advierte que dejar que el tipo de cambio se ubique en la banda inferior podría generar volatilidad en el segundo semestre, cuando la oferta de dólares disminuya y se acerquen las elecciones legislativas. Para cumplir con la meta de reservas netas acordada con el FMI, el gobierno deberá comenzar a comprar dólares en el mercado.
Desde Wise Capital explican que, si el dólar baja a $1000 o menos, se vendrá una fuerte compresión del Riesgo País, que impulsará al alza los bonos y las acciones. Sin embargo, desde LCG advierten que el carry trade cubierto ya no garantiza ganancias en dólares y que la acumulación de reservas debe provenir de fuentes más genuinas, como el comercio exterior.
¿Apreciación genuina o espejismo?
La gran pregunta es si esta baja del dólar es sostenible en el tiempo. ¿Estamos ante una verdadera apreciación del peso o es solo una calma temporal? La respuesta no es sencilla, ya que intervienen múltiples factores. La liquidación de la cosecha gruesa y la política del BCRA son factores temporales. Una vez que se termine la cosecha y el BCRA comience a comprar dólares para acumular reservas, la tendencia podría revertirse.
El contexto pre-electoral y la incertidumbre económica podrían generar una mayor demanda de dólares, presionando al alza el tipo de cambio. Además, la inflación podría licuar las bandas de flotación, reduciendo el atractivo de mantener pesos.
En definitiva, la baja del dólar tras la salida del cepo es una buena noticia, pero es importante tomarla con cautela. No estamos ante una apreciación genuina del peso, sino ante una combinación de factores temporales que favorecen la baja del dólar. El futuro del tipo de cambio dependerá de las políticas que implemente el gobierno, del comportamiento del BCRA y de la evolución de la economía argentina. Esté atento y tome decisiones financieras informadas.
El dólar ha dejado de ser el ‘objeto de deseo’, ¡es hora de pensar en pesos!