En un trágico suceso ocurrido en la localidad de Los Juríes, Santiago del Estero, una disputa familiar por el maltrato animal culminó con la muerte de Ricardo Serrano, de 59 años, a manos de su hermano Julio, de 54. El agresor, tras cometer el fratricidio, se entregó a las autoridades en la Comisaría 48°.
La tragedia familiar en Los Juríes
El viernes por la tarde, en el Lote 41, a pocos kilómetros de Los Juríes, una acalorada discusión entre los hermanos Serrano desencadenó un violento episodio. Según el relato del agresor, la disputa se originó por un reclamo de Julio hacia Ricardo concernant el maltrato que este último infligía a sus animales.
Los hermanos, quienes residían a escasos 20 metros de distancia, mantenían una relación conflictiva, situación que se agravó con la discusión. El reclamo de Julio por el bienestar de los animales habría sido el detonante de la tragedia. Ricardo, según la versión de Julio, respondió con violencia física, utilizando un palo para agredir a su hermano.
En defensa propia, Julio tomó un fierro y golpeó a Ricardo, quien intentó huir a su casa. Sin embargo, Julio lo persiguió y le propinó un golpe en la nuca que lo hizo caer al suelo. Una vez en el piso, Ricardo recibió dos fierrazos más en la cabeza que le causaron la muerte.
La confesión del agresor
Tras el ataque, Julio Serrano huyó del lugar, pero posteriormente se presentó en la Comisaría 48°, confesando el crimen y entregándose a las autoridades. En su declaración, Julio manifestó haber actuado en defensa propia y que, al creer haber matado a su hermano, entró en pánico y escapó. “Creí que lo había matado”, declaró Julio a la policía.
La policía, alertada por la confesión, se dirigió al lugar del crimen, una zona de difícil acceso debido a las fuertes lluvias del día anterior. Allí encontraron el cuerpo sin vida de Ricardo Serrano, tendido en el suelo, boca abajo y con evidentes heridas en la cabeza. Un charco de sangre rodeaba el cuerpo, y en su mano izquierda, la víctima sostenía un palo.
La fiscal Alejandra Sobrero, a cargo de la investigación, ordenó el traslado del cuerpo a la morgue del Hospital de Añatuya, en General Taboada, para realizar la autopsia correspondiente. Personal de Criminalística trabajó en la escena del crimen recolectando pruebas para esclarecer los hechos.
El impacto en la comunidad
El brutal fratricidio ha conmocionado a la comunidad de Los Juríes, una localidad rural donde este tipo de hechos violentos no son comunes. Vecinos y conocidos de los hermanos Serrano se mostraron consternados por la tragedia. Algunos describieron a Ricardo como una persona problemática, mientras que otros destacaron la tranquilidad de Julio.
Las autoridades locales han expresado su preocupación por el aumento de la violencia en la zona rural y han anunciado medidas para reforzar la seguridad. La fiscal Sobrero ha declarado que se investigarán a fondo los hechos para determinar las circunstancias exactas del crimen y establecer las responsabilidades correspondientes.
El caso ha generado un debate sobre la necesidad de abordar los problemas de violencia familiar y la importancia de la salud mental en las zonas rurales, donde el acceso a servicios de atención psicológica y social es limitado. Organizaciones de la sociedad civil han pedido a las autoridades que implementen programas de prevención y atención para las víctimas de violencia.
Próximos pasos en la investigación
La investigación continúa su curso, y se espera que la autopsia revele más detalles sobre las causas de la muerte de Ricardo Serrano. La fiscal Sobrero ha solicitado la declaración de testigos y la recopilación de pruebas adicionales para reconstruir los hechos y determinar si Julio actuó en legítima defensa o si se trató de un homicidio intencional.
Además, se investigará el historial de violencia familiar entre los hermanos, ya que algunos vecinos han mencionado episodios previos de agresiones. El resultado de la investigación determinará la imputación final contra Julio Serrano y las posibles consecuencias legales que enfrentará.
Este caso pone de manifiesto la importancia de abordar los conflictos familiares de manera pacífica y la necesidad de buscar ayuda profesional cuando la situación lo requiera. La violencia nunca es la solución, y las consecuencias pueden ser devastadoras, como en esta tragedia que enluta a la comunidad de Los Juríes.