La vicegobernadora de Neuquén, Gloria Ruiz, se encuentra en el epicentro de un escándalo político que sacude la provincia. Su hermano, Pablo Ruiz, está bajo investigación por un presunto desvío millonario de fondos públicos, un escándalo que amenaza con desatar una crisis política de proporciones.
El Hermano de la Vicegobernadora en el Ojo del Huracán
Pablo Ruiz, hasta hace poco coordinador de la Casa de las Leyes, un espacio cultural dependiente de la Legislatura, es el centro de la tormenta. Según trascendió, recibió transferencias millonarias de la Legislatura a su cuenta personal, por un monto cercano a los 30 millones de pesos. ¿A dónde fue ese dinero? La pregunta retumba en los pasillos del poder neuquino.
El Banco Provincia del Neuquén (BPN), al detectar movimientos inusuales en la cuenta de Ruiz, dio la voz de alarma, desencadenando una investigación que culminó con allanamientos en la Legislatura, la Casa de las Leyes y el domicilio de Ruiz. El fiscal jefe Pablo Vignaroli describió la situación como “extraña”, mientras que fuentes cercanas a la investigación hablan de posibles irregularidades que aún no se han destapado completamente.
La Reacción de Gloria Ruiz: Despido y Negación
Tras días de silencio sepulcral, la vicegobernadora Gloria Ruiz reaccionó con una decisión fulminante: el despido de su hermano. En un comunicado oficial, argumentó que este despido buscaba “asegurar que no se interfiera en el accionar del Ministerio Público Fiscal y garantizar la independencia del poder judicial”. Sin embargo, las palabras de Ruiz no lograron aplacar las llamas del escándalo.
El comunicado, seco y formal, contrastó notablemente con el tono apasionado de un posterior mensaje en redes sociales. En esta publicación, Ruiz se defendió con vehemencia, negando cualquier implicación en el desvío de fondos y denunciando una persecución política. Acusó al gobernador Rolando Figueroa de orquestar una campaña en su contra, de pretender desestabilizar su gestión, e incluso sugirió que se trata de una maniobra para limpiar una situación de corrupción a nivel más alto.
Además, Ruiz aseguró que acudirá a la justicia para defender su inocencia y su rol institucional. “No voy a renunciar”, sentenció con firmeza en un mensaje que parece más un desafío directo que una simple afirmación.
La Defensa de Pablo Ruiz: El Abogado se Pronuncia
El abogado defensor de Pablo Ruiz, Federico Diorio, tomó la iniciativa de dirigirse a la fiscalía. Su estrategia: demostrar que su cliente cuenta con recursos propios y otras fuentes de ingresos, justificando así las importantes sumas de dinero en sus cuentas. Según Diorio, la investigación intenta manchar la imagen de Gloria Ruiz sin fundamento alguno.
Para Diorio, el pedido de juicio político y las imputaciones contra Gloria Ruiz constituyen un “atropello institucional”. Alega que el pueblo neuquino la eligió democráticamente y que manchar su imagen con una acusación de desvío de fondos sin pruebas concretas es una grave falla de las instituciones.
Pero, ¿será suficiente esta estrategia para sofocar la tormenta que acecha a la vicegobernadora? La opinión pública se encuentra dividida. Mientras que algunos apoyan a Ruiz, argumentando una posible caza de brujas política, otros critican su silencio inicial y la opacidad del manejo de la Legislatura, enfatizando los conflictos de interés resultantes de las múltiples designaciones de familiares en puestos claves dentro de la administración.
Un Escándalo de Dimensiones Mayores
La investigación por el desvío de fondos no solo involucra a Pablo Ruiz. También se investigan posibles irregularidades en la gestión de la Casa de las Leyes, con la sospecha de que otros funcionarios podrían estar implicados en la trama. La situación del periodista Leonardo Boela, asesor externo de la Legislatura, también suma intriga al caso, con algunas fuentes señalando su posible vinculación con el desvío de fondos.
Esta investigación resalta un problema mayor: el manejo opaco y, en muchos casos, nebuloso de los fondos públicos en Argentina. El caso de Neuquén expone fallas estructurales y la urgencia de establecer mecanismos más transparentes y robustos de control. El destino de Gloria Ruiz, por lo tanto, parece estar ligado a la evolución de la investigación y al juicio público que se ha desatado en torno al presunto desvío de fondos de la Legislatura.
El tiempo dirá si las explicaciones de la vicegobernadora y su abogado convencen a la Justicia y al pueblo neuquino, o si este escándalo, cargado de acusaciones graves, termina por derrumbar su carrera política y sacude la estabilidad política de Neuquén de forma definitiva. Pero, por ahora, las sombras de sospecha recaen pesadamente sobre la vicegobernadora y la familia Ruiz. El desenlace se encuentra incierto en el teatro político de la Patagonia.
Por Amarillo “Polémica” Pérez