En el marco del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) celebrado en Lima, Perú, los líderes de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón se reunieron en una cumbre trilateral que ha sido considerada como un evento crucial para la estabilidad regional. La reunión, que tuvo lugar el pasado viernes, reforzó la cooperación estratégica establecida entre estos tres países en 2023 y se centró en la respuesta a la creciente amenaza de Corea del Norte.
Consolidación de la Alianza Trilateral
Esta cumbre en Lima marcó un nuevo capítulo en la alianza iniciada en Camp David en agosto de 2023. Los líderes reafirmaron su compromiso con reuniones anuales para consolidar su cooperación estratégica, un paso vital para institucionalizar los avances logrados hasta la fecha. La Casa Blanca, a través de su asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan, recalcó la importancia de asegurar que esta cooperación perdure, incluso ante posibles cambios políticos en Washington.
El encuentro no sólo sirvió para reafirmar lazos sino también para consolidar acuerdos previos. Se destacó la intensificación de la colaboración en seguridad, que incluye ejercicios militares conjuntos y el intercambio de información sensible sobre misiles balísticos. El compromiso mutuo para la consulta ante retos de seguridad compartidos fue reiterado.
La Amenaza Norcoreana y la Cooperación Regional
Uno de los puntos centrales de la cumbre fue la discusión sobre las tensiones regionales, particularmente el inquietante despliegue de tropas norcoreanas en apoyo de Rusia en su guerra contra Ucrania. La confirmación previa por parte de funcionarios surcoreanos y estadounidenses de la presencia de soldados norcoreanos en la línea del frente de Kursk ha elevado la preocupación internacional.
Los tres líderes acordaron avanzar en la creación de una secretaría permanente para la cooperación trilateral, aunque algunos detalles quedaron pendientes para la próxima transición gubernamental en Estados Unidos. Esta estructura busca formalizar y asegurar la continuidad de la colaboración más allá de cambios políticos internos en cualquier de las naciones implicadas.
El Peso de la Historia y los Avances Recientes
La cumbre también fue un reflejo de los avances logrados desde la histórica reunión de Camp David, donde se superaron tensiones bilaterales entre Corea del Sur y Japón gracias a la propuesta de Yoon Suk Yeol para resolver el conflicto histórico sobre las compensaciones a víctimas del trabajo forzado durante la ocupación japonesa. Este gesto abrió el camino para la primera cumbre trilateral independiente, un hito en la cooperación entre los tres países.
Desde ese momento, los tres países han trabajado conjuntamente en una serie de iniciativas de seguridad, compartiendo información vital para contrarrestar posibles amenazas. Esta cooperación se ha convertido en un factor crucial para la estabilidad en el Indopacífico, un hecho que fue destacado tanto por Biden, quien enfatizó el nivel histórico alcanzado por las alianzas de EE. UU. en la región, como por los otros mandatarios.
Declaraciones de los Líderes y el Futuro de la Alianza
El presidente Biden se mostró optimista sobre el futuro de la cooperación trilateral, afirmando que será la base para la paz y la estabilidad en la región en los próximos años. Resaltó la importancia de contrarrestar la peligrosa cooperación entre Corea del Norte y Rusia. Por su parte, el presidente surcoreano Yoon Suk Yeol, destacó el compromiso de los tres países con el desarrollo continuo de su cooperación y reconoció la amenaza que la colaboración militar entre Corea del Norte y Rusia representa para la seguridad regional.
El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, enfatizó la importancia de esta alianza en la garantía de la paz y la estabilidad de la región en el contexto de los desafíos internacionales cada vez más complejos. El consenso sobre la creación de una secretaría permanente, como se planteó en la cumbre, subraya la importancia estratégica otorgada por las tres naciones a esta alianza trilateral para la seguridad del Indo-Pacífico.
Una Respuesta Conjunta ante la Amenaza
La cumbre trilateral en el marco de la APEC en Lima ha demostrado el compromiso sólido de Corea del Sur, Estados Unidos y Japón para enfrentar los desafíos de seguridad regionales, particularmente la creciente amenaza representada por la cooperación entre Corea del Norte y Rusia. La alianza trilateral, consolidada por la cumbre, demuestra una estrategia unificada para asegurar la estabilidad en el Indopacífico y servirá como un pilar para la cooperación en un futuro incierto.
El establecimiento de una secretaría permanente representa un gran avance para asegurar la continuidad de esta cooperación a largo plazo. La creación de esta estructura, aun con algunos detalles pendientes, es sin duda un paso significativo para contrarrestar la influencia creciente de Corea del Norte y garantizar la estabilidad en el complejo escenario geopolítico de la región.