El mercado crediticio en Argentina presenta un panorama complejo y en constante evolución. Si bien el acceso al crédito ha disminuido en el último año, la morosidad también ha experimentado una reducción significativa. Este fenómeno, aparentemente contradictorio, se explica por una combinación de factores, entre los que destacan la prudencia de las entidades financieras, la creciente adopción de tecnologías para la gestión del riesgo y el auge de las fintech.
Menos acceso, pero mayor cumplimiento
Según datos de la Central de Deudores del BCRA y SIISA, el porcentaje de personas con acceso a crédito en Argentina disminuyó del 56% en 2023 al 50% en 2024. Esta reducción se atribuye principalmente al contexto económico adverso, marcado por la inflación y la recesión. Sin embargo, la tasa de morosidad ha mostrado una tendencia inversa, pasando del 82% de personas al día con sus pagos en 2023 al 86% en 2024.
Este comportamiento sugiere que las entidades financieras han ajustado sus políticas de crédito, priorizando la calidad sobre la cantidad. Los montos promedio de los préstamos se han mantenido relativamente estables, con una leve disminución del 2% en términos reales. La mayor cautela en la concesión de créditos se refleja en la reducción del 7% en el número de originaciones y del 8% en los importes otorgados en 2024, en comparación con el año anterior.
El auge de las Fintech: inclusión financiera y agilidad
En este contexto, las entidades financieras no bancarias, en particular las fintech, han ganado terreno. Su participación en el mercado crediticio aumentó un 17% en términos de usuarios en el último año, pasando del 18% al 21%. Este crecimiento se debe a su capacidad para ofrecer productos más ágiles y personalizados, con una experiencia de usuario más digital, adaptada a las necesidades de un público más amplio.
Las fintech han aprovechado la tecnología para reducir costos operativos, llegar a sectores de menores ingresos y ofrecer alternativas a la banca tradicional. Han implementado plataformas de préstamos digitales, herramientas de validación de identidad y sistemas automatizados de evaluación de riesgos, que les permiten agilizar los procesos y ofrecer una experiencia más eficiente.
La innovación como motor de la transformación
La transformación digital del mercado financiero está en marcha. La CEPAL reporta un crecimiento anual del 23% en la adopción de tecnologías digitales en el sector financiero latinoamericano entre 2018 y 2023. La innovación es clave para la competitividad, no solo para las fintech, sino también para los bancos tradicionales, que deben adaptarse a las nuevas demandas de los usuarios.
“La clave para mantener la competitividad en el mercado será la innovación constante y la capacidad de adaptarse rápidamente a las nuevas demandas de los usuarios” – Alberto Teszkiewicz, coordinador de Investigación y Desarrollo de SIISA.
La digitalización, la automatización, la inteligencia artificial y la firma electrónica son algunas de las herramientas que están revolucionando la gestión del crédito. Estas tecnologías permiten una mejor evaluación de riesgos, una mayor eficiencia en los procesos y una experiencia más satisfactoria para el cliente. Además, contribuyen a la inclusión financiera, al facilitar el acceso al crédito a segmentos de la población tradicionalmente excluidos.
En un mundo cada vez más digitalizado, el futuro del crédito pasa por la innovación. Las entidades financieras que sepan adaptarse a este nuevo escenario, adoptando tecnologías que les permitan ofrecer productos más ágiles, personalizados y accesibles, serán las que lideren el mercado en los próximos años. El desafío para Argentina es acelerar la transformación digital del sector financiero, para promover la inclusión financiera y el desarrollo económico.
En resumen, el mercado crediticio argentino se encuentra en un punto de inflexión. La disminución del acceso al crédito contrasta con una mayor responsabilidad en los pagos. El crecimiento de las fintech y la adopción de nuevas tecnologías están cambiando las reglas del juego, ofreciendo oportunidades para la inclusión financiera y la eficiencia en la gestión del riesgo. La innovación es la clave para la competitividad en este nuevo escenario.
Este análisis del mercado crediticio argentino nos muestra una clara tendencia: la tecnología está redefiniendo cómo se otorgan y gestionan los préstamos. La capacidad de las entidades financieras para innovar y adaptarse será crucial para su éxito en el futuro. El camino hacia una mayor inclusión financiera y un sistema crediticio más eficiente está pavimentado con innovación.