Una mujer de 45 años, oriunda de Tucumán, fue detenida en la provincia de Córdoba luego de protagonizar un violento incidente con efectivos de la Policía Caminera. La secuencia comenzó cuando la conductora, quien transitaba a bordo de una Volkswagen T-Cross junto a sus tres hijas menores de edad y un joven de 24 años, fue interceptada en un control de velocidad por circular a 136 kilómetros por hora en la Ruta Nacional 9, a la altura de El Rodeo, departamento Tulumba.
El inicio del incidente: la multa y la reacción violenta
Al ser notificada sobre la infracción por exceso de velocidad, la mujer reaccionó con furia e incredulidad. En lugar de aceptar la multa, según los reportes policiales, la conductora comenzó a agredir verbalmente a los agentes, acusándolos de solicitar una coima. La situación rápidamente se tornó violenta cuando la mujer arrebató la documentación a una oficial inspectora, golpeándole las muñecas y provocando la rotura de su chaleco reflectivo.
Ante la escalada de agresividad, la oficial solicitó refuerzos. Mientras tanto, la mujer se resistió al arresto, encerrándose en su vehículo, un Volkswagen T-Cross. Con la ayuda de los efectivos de la Departamental Tulumba, los policías lograron trasladar tanto a la mujer como su vehículo hasta la comisaría de San José de la Dormida.
La huida y el atropello a los agentes
Ya en la comisaría, al momento de informar a la conductora que se encontraba detenida, ella, inesperadamente, volvió a subir a su vehículo. A pesar de las indicaciones de los agentes para que descendiera, la mujer aceleró y emprendió la huida, sin importarle la presencia de los oficiales. En su desesperada fuga, atropelló a un cabo primero, arrastrándolo varios metros en el capó del vehículo. Otro policía, un sargento primero, resultó con lesiones leves al ser golpeado en una pierna por el automóvil.
Tras una breve persecución, la mujer fue interceptada a unos 100 metros de la comisaría y detenida. Los efectivos involucrados recibieron asistencia médica, mientras que el estado de salud de los agentes fue reportado como estable aunque con lesiones de distinta gravedad. Las hijas menores y el joven acompañante resultaron ilesos, y fueron puestos bajo custodia de la dependencia social competente hasta la determinación de las medidas judiciales.
Consecuencias legales y cierre del caso
La Fiscalía de la localidad de Deán Funes imputó a la mujer por los delitos de resistencia a la autoridad, daño y lesiones leves. La investigación continúa para determinar si existen otros cargos que puedan aplicarse a la conductora, según determinen las autoridades judiciales pertinentes.
Este incidente recalca la importancia de cumplir las leyes de tránsito y de respetar la autoridad policial. La conducta violenta e irresponsable de la conductora tiene consecuencias penales y la Fiscalía actuará de acuerdo a la legislación vigente. Además se evalúan medidas de protección para los menores de edad implicados.
Recomendaciones para prevenir este tipo de incidentes
- Respetar las normas de tránsito y circular a la velocidad permitida.
- Mantener la calma y la prudencia ante un control policial.
- Cooperar con la autoridad, presentando la documentación necesaria sin agresiones verbales o físicas.
- Ante cualquier incidente de violencia, denunciar a las autoridades competentes.
El caso de la conductora furiosa en Córdoba es un ejemplo extremo, pero nos recuerda la importancia de actuar con responsabilidad tanto al conducir como ante cualquier encuentro con la autoridad. Es fundamental priorizar la seguridad vial y evitar cualquier tipo de conflicto que ponga en riesgo la integridad física de terceros.