En un contexto de creciente preocupación por el cambio climático y la necesidad de reducir costos operativos, el Instituto María de Nazareth, ubicado en La Calera, Córdoba, ha dado un paso significativo hacia la sustentabilidad educativa. La institución se convirtió en pionera al instalar un sistema de energía solar que le permite generar la totalidad de su consumo eléctrico, obteniendo sorprendentes resultados en la reducción de costos y emisiones de CO2.
Reducción significativa de costos en la factura de energía
Gracias a la implementación de un sistema ongrid de 50 kW, compuesto por 100 paneles de 550W, el Instituto María de Nazareth logró reducir en un 25% su factura de energía eléctrica en octubre, en comparación con septiembre. Este logro es aún más destacable considerando que, durante el mes de octubre, se instalaron 30 aires acondicionados nuevos, aumentando notablemente la demanda de electricidad. Sin los paneles solares, el incremento en la factura hubiese sido sustancialmente mayor.
En el ítem ‘Energía Resto’, la categoría de mayor consumo de la factura, se observó una disminución del consumo de 5835 kWh en septiembre a 3867 kWh en octubre. Esta reducción, del 50%, evidencia la eficacia del sistema solar incluso ante un incremento considerable en el uso de energía debido a la incorporación de los aires acondicionados. En términos económicos, la factura de octubre, con los aires acondicionados en funcionamiento durante días de altas temperaturas, llegó a $2.262.776,50, un ahorro significativo en el contexto de los recientes aumentos en el precio de la energía (2.7% en octubre y un 2.5% proyectado para noviembre).
Un proyecto educativo integral: más que paneles solares
Para el Instituto María de Nazareth, la instalación de los paneles solares es parte integral de un ambicioso programa educativo orientado a la sustentabilidad ambiental. Este proyecto abarca todas las etapas educativas, desde el nivel inicial hasta el secundario, buscando inculcar valores de responsabilidad ambiental y liderazgo comprometido.
El compromiso del colegio se manifiesta en diversas iniciativas, tales como proyectos de separación de residuos, compostaje, reciclaje de papel y la utilización de materiales reutilizables en actividades educativas. La colaboración con la empresa Ecolink para la gestión de los residuos reciclables es un claro ejemplo del compromiso del instituto con el medio ambiente. La realización de charlas y talleres sobre la temática ambiental completa este enfoque educativo integral.
La rentabilidad de la inversión en energía solar
Andrea Areta, representante legal del colegio, explicó que la decisión de instalar los paneles solares responde a la necesidad de disminuir los costos ante el aumento del consumo y el crecimiento edilicio del instituto. La inversión en el sistema fotovoltaico, llevada a cabo por Max Energía, se recuperará en un plazo estimado de tres a cinco años, según explicó el Ing. Darío Calderón, socio gerente de Max Energía. Posteriormente, la energía generada será gratuita, un beneficio sustancial a largo plazo.
El sistema ongrid permite al colegio utilizar la energía solar generada durante el día e inyectar los excedentes a la red eléctrica de EPEC durante los periodos de baja demanda. Esto significa que el colegio no solo ahorra en su factura mensual, sino que también vende su energía excedente, lo que se traduce en una mayor rentabilidad de la inversión. Según Calderón, la inversión se amortizará rápidamente, luego la energía generada será gratuita. Además, se estima una reducción de más de 40 toneladas de CO2 emitidas al año, contribuyendo significativamente a la disminución de la huella de carbono del colegio.
Un modelo inspirador para otras instituciones
El éxito del proyecto en el Instituto María de Nazareth ha generado un efecto contagio en otras instituciones educativas. Max Energía, la empresa responsable de la instalación de los paneles, ya ha concretado proyectos similares en otros colegios de Córdoba, como el Colegio El Torreón y Cinco Ríos, y tiene en curso la implementación de sistemas en el Instituto Secundario Raúl Loza en Luque y el Colegio Maryland de Villa Allende, entre otros.
El auge de este tipo de iniciativas se ve impulsado por el cambio en las tarifas de energía y la rentabilidad creciente de este tipo de inversiones. Las instituciones que tienen un alto consumo durante las horas de sol son las que más se benefician de la energía solar. Además del ahorro económico, estas acciones demuestran un fuerte compromiso con la sustentabilidad y promueven la educación ambiental en la comunidad educativa, utilizando tecnología de última generación.
Un futuro más verde y sustentable para la educación
La experiencia del Instituto María de Nazareth demuestra que la transición hacia la energía renovable es no solo posible sino también rentable y necesaria para las instituciones educativas. El ahorro económico, la reducción de la huella de carbono, y el impacto positivo en la comunidad educativa convierten a la energía solar en una inversión estratégica que inspira a otras instituciones a seguir este camino hacia un futuro más verde y sustentable.