Franco Colapinto, el joven piloto argentino, se encuentra en Las Vegas preparándose para su séptima participación en la Fórmula 1. Su llegada a la ciudad del juego estuvo marcada por un breve encuentro con aficionados argentinos en la Fan Zone, antes de enfocarse en el desafío que representa el circuito callejero de Las Vegas, una pista nocturna y desconocida para él.
El accidente en Brasil: un punto de inflexión
El Gran Premio de Brasil dejó una marca significativa en la joven carrera de Colapinto. Un accidente que causó importantes daños tanto a su vehículo como al de su compañero Alex Albon, resultando en un abandono para el piloto argentino y la imposibilidad de competir para el piloto tailandés. Este incidente, ocurrido en medio de condiciones de lluvia, supuso un revés tras una racha de cinco carreras positivas.
El impacto emocional del accidente fue considerable, según admite el propio Colapinto, pero la experiencia le dejó valiosas lecciones para el futuro. “Llevó un poco de tiempo reponerme, pero son cosas que pasan en este deporte”, explicó. “Fue una experiencia más para seguir aprendiendo. Me llevé lo bueno y lo malo.”
Un futuro incierto en la Fórmula 1
Mientras se prepara para la carrera en Las Vegas, Colapinto se enfrenta a la incertidumbre sobre su futuro en la Fórmula 1. Si bien su desempeño ha sido notable en varias ocasiones, con logros como la obtención de sus primeros cuatro puntos en Azerbaiyán, aún no está asegurado como piloto titular para la temporada 2025.
Las negociaciones están en curso. Se rumorea que Christian Horner, jefe de Red Bull, mantiene conversaciones con James Vowles de Williams para explorar la posibilidad de que Colapinto se una a la escudería austriaca, posiblemente como reemplazo de Sergio Pérez. Esta situación crea un panorama complejo y emocionante para el futuro del piloto argentino.
Preparación intensa para Las Vegas
Tras el accidente en Brasil, Colapinto ha dedicado tres semanas a un intenso entrenamiento en el simulador de F1 de Williams en Grove. Jornadas de once horas diarias, con solo una hora de descanso para almorzar, se centraron en dominar los circuitos de Las Vegas y Qatar, ambos completamente nuevos para él.
El trabajo en el simulador refleja la determinación de Colapinto de revertir la situación en Las Vegas y demostrar su valía. “Quiero dar lo mejor”, afirma el piloto. “El equipo está haciendo un buen trabajo y se merece buenos resultados. Voy paso a paso. Se vienen circuitos difíciles, pero creo que tenemos una buena oportunidad aquí y me encantaría dejar atrás lo de Brasil, resetear y empezar de cero.”
El desafío de la carrera nocturna
La carrera nocturna en Las Vegas representa un desafío añadido. Colapinto admite la complejidad de los horarios, la necesidad de adaptar los patrones de sueño y el impacto visual de la iluminación del circuito. A pesar de estas dificultades, se muestra entusiasmado con la experiencia: “Me gusta. Es divertido. Es un poco más de desafío para los pilotos, pero es una linda experiencia. Es muy divertido correr de noche con las luces.”
El presente en Williams y el futuro incierto
Por el momento, Colapinto tiene tres carreras más con Williams en 2024. Las Vegas, Qatar y Abu Dhabi son las etapas restantes de la temporada. Si bien su futuro en la Fórmula 1 es incierto, su desempeño en estas carreras, unido a la evolución de las negociaciones con otros equipos, determinará sus posibilidades de continuar como piloto titular.
La carrera de Colapinto se bifurca en dos caminos. Por un lado, la competencia en la pista. Por otro, la ardua tarea de sus managers, María Catarineu y Jamie Campbell-Walter, quienes trabajan incansablemente para asegurarle un lugar en la parrilla de salida para el año 2025. El desenlace de ambas carreras definirá su futuro en la máxima categoría del automovilismo.