¿Estamos ante la ‘brasilianización’ del mercado automotor argentino, o simplemente frente a una bocanada de aire fresco para los consumidores? En este artículo, desglosaremos los factores que impulsan este fenómeno y analizaremos su impacto en la industria local, ofreciéndote una visión clara y concisa de lo que está sucediendo.
ACE14 al desnudo: La verdad detrás de la apertura comercial
La administración del presidente Javier Milei ha implementado una política de apertura comercial que ha transformado el panorama de las importaciones en Argentina. La eliminación de las SIRA (Sistema Integral de Monitoreo de Importaciones), que previamente limitaban la entrada de vehículos extranjeros, ha facilitado el ingreso de autos brasileños al mercado local. Sin embargo, esta apertura no es total debido al Acuerdo de Complementación Económica N° 14 (ACE14) que Argentina tiene con Brasil. Este acuerdo establece que una apertura total solo sería posible en julio de 2029 o mediante la ruptura de las relaciones comerciales con el país vecino. Como resultado, los aranceles siguen siendo un factor importante a considerar.
Un importador oficial señaló que abrir las importaciones sin tocar los aranceles podría inundar las calles argentinas de autos brasileños. Actualmente, existe un arancel del 35% para las importaciones de fuera de la zona, lo que influye en la competitividad de los vehículos provenientes de otros orígenes.
El pulso del mercado: Cifras clave de ventas y origen de los autos
Analicemos el pulso del mercado automotor argentino a través de sus números. Observamos un crecimiento significativo impulsado por los modelos importados. En marzo, los autos de origen nacional representaron el 47% de los patentamientos, mientras que los brasileños alcanzaron el 45%. Esto indica que los autos importados en su conjunto superan a los nacionales, representando el 53% del mercado. Sin embargo, es crucial analizar estos porcentajes en términos de unidades vendidas para comprender mejor el impacto real.
Según las cifras actuales, el 45% de autos brasileños equivale a 72.500 unidades, mientras que el 47% de autos nacionales representa 75.700 unidades. El remanente, correspondiente a autos importados de otros países (incluyendo los extra zona y los provenientes de México con arancel 0%), suma 12.800 unidades. Estos números revelan una competencia reñida entre la producción nacional y la brasileña.
Radiografía del mercado: Comparativa histórica y proyección 2025
Para comprender mejor la evolución del mercado, comparemos los datos de los últimos años y proyectemos las tendencias futuras. En el primer trimestre de 2024, se vendieron 84.781 unidades, de las cuales el 62% eran de fabricación nacional, el 29% provenían de Brasil y solo el 7.6% eran importados de otros destinos. En contraste, en el mismo período de 2023, con un mercado de 120.000 autos, la industria argentina tenía el 64.2% del mercado, Brasil el 28.3% y los importados de otros países el 7.5%.
La proyección para 2025, con un mercado estimado en 550.000 autos, sugiere que, si la proporción actual se mantiene, 258.000 unidades serán de producción nacional, 247.000 brasileñas y 44.000 importadas de otros mercados. Estas cifras indican un crecimiento en el volumen total de ventas, pero también una mayor competencia entre los diferentes orígenes.
- 2023: Industria argentina 64.2%, Brasil 28.3%, Otros 7.5%
- 2024: Industria argentina 62%, Brasil 29%, Otros 7.6%
- 2025 (Proyección): Industria argentina 47%, Brasil 45%, Otros 8%
Voces de la industria: ¿Oportunidad o amenaza?
¿Cómo ven este panorama los actores clave del sector? Martín Zuppi, presidente de Stellantis Argentina y de ADEFA (Asociación de Fábricas de Automotores), señala que, aunque la participación de mercado de los autos nacionales pueda disminuir, el volumen total de ventas está aumentando. Para él, lo importante es generar sustentabilidad productiva. Stellantis, por ejemplo, proyecta producir cerca de 200.000 autos en 2025, en comparación con los 160.000 de 2024.
“Aun perdiendo participación del mercado, estás ganando volumen.”
Esta visión es compartida por empresarios que se dedican exclusivamente a la importación. Argumentan que gran parte de las importaciones provienen de las propias terminales automotrices, lo que mitiga el impacto negativo en la industria local. Además, destacan que la apertura comercial ha permitido un aumento en la importación de autos de países más desarrollados.
En 2023, los autos importados de otros países eran 27.000, y se espera que en 2025 alcancen casi las 50.000 unidades. Esto diversifica la oferta y brinda más opciones a los consumidores.
Los protagonistas: Análisis de modelos que marcan tendencia
Analicemos algunos modelos que están marcando la pauta en el mercado. La pickup Toyota Hilux, el auto más vendido en Argentina, ha aumentado sus patentamientos de 4.922 unidades en el primer trimestre de 2024 a 8.628 en el mismo período de 2025. Sin embargo, su participación de mercado ha disminuido del 6.1% al 5.6%.
El Fiat Cronos, por su parte, ha experimentado una mayor pérdida de participación, cayendo del 12% al 6.5% en un año. A pesar de esto, sus ventas han aumentado ligeramente, pasando de 9.680 autos en 2024 a 9.929 en 2025. Esto demuestra que, si bien algunos modelos nacionales pueden perder terreno en términos de porcentaje, el crecimiento general del mercado les permite mantener o incluso aumentar su volumen de ventas.
En cuanto a los modelos importados, el Volkswagen Polo, proveniente de Brasil, es el que más ha crecido. Sus ventas han aumentado de 2.115 unidades en el primer trimestre de 2024 (2.6% del mercado) a 5.308 unidades en el mismo período de 2025 (3.5% del mercado). Esto refleja el impacto positivo de la apertura comercial en la disponibilidad y elección de modelos brasileños.
El caso de los extra zona: Ford Territory
No solo los autos brasileños se benefician de la apertura, un modelo extra zona como es el Ford Territory, importado desde China, ha mostrado un crecimiento importante. En 2024 cerró el trimestre con un 1.9% del mercado (1.507 unidades), y en 2025 subió al 2.2% con 3.422 automóviles vendidos. Esto demuestra que la mayor competencia no solo se limita a la relación con Brasil, sino que también abre las puertas a vehículos de otros orígenes.
¿Invasión o respiro competitivo? Conclusiones para tu bolsillo
El análisis de los datos y las opiniones de la industria sugieren que, si bien los autos brasileños están ganando terreno en el mercado argentino, no se trata necesariamente de un dominio absoluto. Más bien, estamos presenciando una mayor competencia y diversificación de la oferta, lo que beneficia a los consumidores al brindarles más opciones y precios más competitivos. ¡Más opciones, mejores precios: así beneficia la competencia a tu bolsillo!
La clave para la industria automotriz argentina estará en adaptarse a este nuevo escenario, buscando la sustentabilidad productiva y aprovechando las oportunidades que brinda un mercado en crecimiento. La importación de autos brasileños, junto con la llegada de modelos de otros orígenes, puede impulsar la innovación y la eficiencia en la producción local, generando un círculo virtuoso que beneficie a toda la cadena de valor.
En definitiva, el avance brasileño en el mercado automotor argentino no debe ser visto como una amenaza, sino como un desafío que puede impulsar el crecimiento y la competitividad de la industria local. El futuro del sector dependerá de la capacidad de adaptación y la visión estratégica de los actores involucrados.
Preguntas frecuentes
Aquí respondemos algunas de las preguntas más comunes sobre este tema:
- ¿Afectará la importación de autos brasileños a los empleos en la industria automotriz argentina?
- ¿Qué modelos brasileños son los más convenientes en términos de precio y calidad?
- ¿Cómo impactará la electromovilidad en la competencia entre autos nacionales e importados?
- ¿Qué incentivos fiscales existen para la producción automotriz en Brasil y cómo afectan la competitividad de sus autos?