El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió una alerta meteorológica para 14 provincias argentinas ante la inminente llegada de fuertes tormentas que podrían ser severas. Las alertas, divididas en niveles naranja y amarillo, abarcan una amplia zona del país, incluyendo provincias del centro, este, norte y sur, demandando especial atención a las recomendaciones de seguridad.
Alertas Naranja: Peligro inminente
El alerta naranja, que indica la posibilidad de fenómenos meteorológicos peligrosos, se extiende a las provincias de Córdoba y Santa Fe. En Córdoba, las localidades más afectadas incluyen Río Primero, Río Segundo y Tercero Arriba, donde se esperan tormentas localmente fuertes o severas, con ráfagas fuertes, actividad eléctrica frecuente, caída de granizo de diversos tamaños, y abundante caída de agua en cortos períodos. Se prevén valores de precipitación acumulada entre 60 y 100 mm, que podrían ser superados en forma puntual.
En Santa Fe, las tormentas ya se registraron en la tarde del domingo y se espera que continúen el lunes en lugares como Rosario y la capital provincial. El SMN informa que estas tormentas podrían provocar interrupciones en las actividades cotidianas y daños materiales.
Para las zonas bajo alerta naranja, el SMN recomienda permanecer en construcciones cerradas, alejarse de artefactos eléctricos, evitar el uso de teléfonos con cable y mantenerse en el interior del vehículo si se está viajando. Se debe evitar circular por calles inundadas y cortar el suministro eléctrico si existe riesgo de ingreso de agua a la casa. En caso de necesitar asistencia, se recomienda contactar a los organismos de emergencias locales.
Alertas Amarilla: Precaución necesaria
Doce provincias argentinas están bajo alerta amarilla, lo que implica la posibilidad de fenómenos meteorológicos con capacidad de daño y riesgo de interrupción momentánea de actividades cotidianas. Estas provincias son: Jujuy, centro de Salta, Tucumán, sur de Santiago del Estero, norte de Santa Fe, Entre Ríos, zonas limítrofes entre San Luis y La Rioja, y partes de San Juan y La Rioja. Además, se incluyen el sur de Mendoza por viento Zonda y Neuquén, oeste de Río Negro y noroeste de Chubut por fuertes vientos. Río Negro y Chubut también tienen alerta amarilla por lluvias persistentes.
Las alertas amarillas anticipan tormentas de variada intensidad, algunas localmente fuertes, con abundante caída de agua en cortos periodos, actividad eléctrica frecuente, caída de granizo y ráfagas intensas. Se prevén valores de precipitación acumulada entre 30 y 50 mm, pudiendo ser superados en forma puntual.
Si bien no implican el mismo nivel de riesgo que las alertas naranjas, las amarillas requieren medidas de precaución. Se recomienda estar atentos a los cambios en las condiciones climáticas y seguir las indicaciones de las autoridades locales.
Recomendaciones generales para ambas alertas
Independientemente del nivel de alerta, se aconseja a la población mantenerse informada sobre las actualizaciones del SMN. Es importante tener a mano un botiquín de primeros auxilios, linternas, radio a pilas y mantener los teléfonos móviles con batería.
El monitoreo continuo de los partes meteorológicos es fundamental para tomar las decisiones correctas y mitigar riesgos. Ante cualquier emergencia, se recomienda comunicarse con los servicios de emergencia locales.
Pronóstico para AMBA
El AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires) se encuentra bajo alerta amarilla. Se espera una alta probabilidad de lluvias y tormentas durante toda la mañana del lunes. Por la tarde, las precipitaciones disminuirán, aunque el cielo se mantendrá nublado. Las precipitaciones podrían regresar en la tarde y noche del martes. Para el miércoles, se pronostica una mejoría en las condiciones climáticas. Las temperaturas promedio serán de 28°C máxima y 20°C mínima durante estos tres días.
El SMN continúa monitoreando la situación y emitirá nuevas alertas según sea necesario. Se recomienda a la población mantenerse informada a través de los canales oficiales del organismo.
La extensa alerta meteorológica resalta la importancia de la preparación y la prevención ante eventos climáticos extremos. El seguimiento de las alertas emitidas por el SMN es crucial para garantizar la seguridad de la población.