En un comunicado difundido recientemente, el ex presidente sirio Bashar al-Assad rompe el silencio y ofrece su versión de los hechos que condujeron a su salida de Damasco en diciembre de 2023. El documento, compartido en redes sociales por la oficina del ex mandatario, desmiente categóricamente los rumores que circularon sobre una supuesta huida planificada o un abandono del país en las horas finales del conflicto. Al-Assad asegura que su salida fue una decisión tomada en circunstancias extremas, tras el colapso del frente de batalla y la imposibilidad de permanecer en territorio sirio debido a la intensificación de los ataques terroristas.
La versión de Al-Assad: permanencia en Damasco hasta el último momento
El ex presidente sirio relata que permaneció en Damasco cumpliendo con sus responsabilidades hasta la mañana del 8 de diciembre, fecha en que las tropas extremistas lograron penetrar la ciudad. Niega rotundamente haber considerado la opción de asilo o renuncia, afirmando que su única alternativa era la de continuar la lucha contra el terrorismo. Su salida hacia Latakia, según el comunicado, tenía como objetivo observar las operaciones militares desde una posición más segura.
Al llegar a la base aérea rusa de Hmeymim, Al-Assad se encontró con la noticia de la caída de Damasco y el colapso generalizado del frente de batalla. Describe una situación caótica, con las líneas de combate desmoronadas y las últimas posiciones del ejército sirio en retroceso. Añade que un intenso ataque con drones a la base rusa imposibilitó cualquier salida, lo que obligó a Moscú a solicitar una evacuación inmediata hacia territorio ruso, la cual se llevó a cabo la noche del 8 de diciembre.
Desmintiendo rumores y acusaciones
El comunicado de Al-Assad busca desmentir las versiones que lo acusaban de abandonar a su pueblo y a su ejército. Insiste en que su salida fue consecuencia directa del colapso de las Fuerzas Armadas y la parálisis de las instituciones estatales, lo que hacía inútil su permanencia en el país. Reitera su compromiso con Siria y su pueblo, afirmando que jamás intercambiaría la salvación de su patria por beneficios personales.
El ex mandatario sirio subraya su lealtad a Siria y su pueblo, destacando su permanencia en Damasco bajo bombardeos y amenazas constantes. Asimismo, defiende su apoyo inquebrantable a las resistencias en Palestina y Líbano, y su fidelidad a los aliados que respaldaron a Siria durante la guerra.
Al-Assad se presenta como un defensor de un proyecto nacional basado en el respaldo popular, cuya convicción en la voluntad del pueblo sirio se mantuvo firme hasta el último momento. Con este comunicado, no solo busca aclarar los hechos que rodearon su salida de Damasco, sino también reivindicar su figura como líder nacionalista y comprometido con la causa siria.
Contexto: La guerra en Siria y el ascenso del terrorismo
Para comprender la magnitud de la situación descrita por Al-Assad, es crucial recordar el contexto de la guerra en Siria y el auge de grupos terroristas como Hayat Tahrir al Sham (HTS). Desde 2011, Siria se ha visto envuelta en un brutal conflicto que ha devastado el país y ha provocado una grave crisis humanitaria. El surgimiento de grupos extremistas, financiados y armados por potencias extranjeras, añadió una capa de complejidad al conflicto, desestabilizando aún más la región.
El avance de HTS y otros grupos terroristas en Siria representó una amenaza directa para la estabilidad del gobierno de Al-Assad. La toma de Damasco, la capital del país, significó un punto de inflexión en la guerra, forzando la salida del ex presidente y marcando el inicio de una nueva fase en el conflicto. El comunicado de Al-Assad arroja luz sobre los momentos críticos que precedieron a su salida, ofreciendo una perspectiva interna de la caída de Damasco y sus consecuencias.
La guerra en Siria ha dejado un saldo de cientos de miles de muertos y millones de desplazados. El país se encuentra en ruinas y la reconstrucción se presenta como un desafío monumental. El comunicado de Al-Assad se produce en un momento en que Siria intenta reconstruirse y recuperar la estabilidad, tras años de violencia e inestabilidad política. Su testimonio proporciona una valiosa pieza del rompecabezas para comprender la complejidad del conflicto sirio y sus consecuencias a largo plazo.
Un futuro incierto para Siria
A pesar de la salida de Al-Assad, el futuro de Siria continúa siendo incierto. La presencia de grupos terroristas, la intervención de potencias extranjeras y las profundas divisiones internas dificultan la construcción de una paz duradera. El comunicado del ex presidente, si bien ofrece su versión de los hechos, no resuelve las interrogantes sobre el futuro del país.
La comunidad internacional enfrenta el desafío de encontrar una solución política que permita la reconstrucción de Siria y el retorno de los refugiados. La salida de Al-Assad del poder no ha significado el fin del conflicto, y la paz en Siria sigue siendo un objetivo elusivo. El comunicado del exmandatario, al revelar detalles inéditos de su salida de Damasco, abre un nuevo capítulo en la historia del conflicto sirio, pero el camino hacia la paz aún está por recorrerse.