Mauricio Macri ha convocado una reunión clave de su mesa chica para definir la estrategia del PRO frente al Gobierno, particularmente en torno a la ley de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU) y las negociaciones con Javier Milei. Esta reunión se produce en un contexto de creciente tensión y malestar en el PRO por la falta de cumplimiento de acuerdos previos con la Casa Rosada.
El objetivo: Presión conjunta sobre el Gobierno
El principal objetivo de Macri es articular una estrategia de presión conjunta con Milei para lograr concesiones del Gobierno en temas cruciales para el PRO. Esto incluye la asignación de partidas presupuestarias para obras públicas en provincias y municipios gobernados por el partido, así como la resolución de temas pendientes, como la coparticipación de la Ciudad de Buenos Aires, la situación de Salto Grande y las cajas jubilatorias de Chubut y Entre Ríos.
El apoyo del PRO al Gobierno en el Congreso, particularmente en la aprobación del presupuesto, será la moneda de cambio en esta negociación. Macri busca convertir ese apoyo en un acuerdo que beneficie a sus gobernadores e intendentes, buscando un ‘win-win’ que asegure avances significativos en sus reclamos.
La Ley de DNU: Un punto clave de tensión
La discusión en torno a la Ley de DNU es particularmente relevante. Macri es consciente de la sensibilidad de este tema para Milei, y la reunión de la mesa chica busca consensuar una postura unificada para abordar esta compleja situación. Existen posiciones encontradas dentro del PRO sobre la mejor forma de presionar al gobierno en este tema, por lo que Macri busca una postura única para negociaciones más eficaces.
La fragilidad parlamentaria del gobierno y su uso frecuente de DNU se ha vuelto un punto álgido. El PRO se posiciona como un actor clave en esta negociación, buscando influenciar en el debate e inclinar la balanza hacia una regulación más restrictiva, mientras busca beneficios para la gestión de sus propios gobernadores e intendentes
Privatizaciones: otra herramienta de presión
Paralelamente a la negociación sobre el presupuesto y los DNU, Macri presiona por una aceleración de las privatizaciones. Considera que es clave para el futuro del país. El ex presidente impulsa el debate sobre la privatización de Aerolíneas Argentinas, con el apoyo de los libertarios y sectores de la oposición, y hace énfasis en la necesidad de acelerar la privatización de Corredores Viales SA.
La demora en estas privatizaciones es vista por Macri como una señal de ineficiencia del Gobierno, y considera que ejercer presión sobre este punto puede ser una manera eficaz de obtener concesiones en otras áreas. En este caso también considera el apoyo de Milei como una herramienta para presionar el Gobierno.
El ajedrez político rumbo al 2025
De cara a las elecciones de 2025, la estrategia de Macri también apunta a fortalecer la posición del PRO en el Congreso. El partido debe renovar una cantidad considerable de bancas, y buscará mantener una posición lo suficientemente influyente como para ser un socio clave para Javier Milei.
El objetivo es alcanzar un número de legisladores que les permita tener una influencia significativa en las negociaciones futuras con el Gobierno y con Milei. Esto, además, se traduce en una mayor capacidad de presión, y se posicionan como actores clave en el futuro escenario político.
Los asistentes a la reunión
La reunión de la mesa chica incluirá figuras clave del PRO, incluyendo a los gobernadores Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Jorge Macri (CABA), y Nacho Torres (Chubut); los diputados Cristian Ritondo, Diego Santilli y María Eugenia Vidal; los intendentes Soledad Martínez (Vicente López) y Guillermo Montenegro (Mar del Plata); además de Facundo Pérez Carletti y Fernando De Andreis.
La diversidad de figuras presentes refleja la importancia de la decisión que se tomará en esta reunión, y la necesidad de consensuar una estrategia que abarque las diferentes necesidades y expectativas de las distintas facciones dentro del partido. Las decisiones resultantes de este encuentro serán cruciales para las futuras negociaciones con el gobierno y con Javier Milei.
un juego de alta tensión
La reunión de Macri representa un momento crucial en el tablero político argentino. La estrategia de presión sobre el Gobierno, combinada con la negociación con Milei, determinará en gran medida la posición del PRO en el futuro. El resultado de esta reunión tendrá consecuencias significativas en las relaciones entre los diferentes actores del escenario político argentino en el camino al 2025.