El mundo digital, con su promesa de conexión e inmediatez, se ha convertido en un terreno fértil para los ciberdelincuentes. Las redes sociales, en particular, se han transformado en el escenario predilecto para las estafas virtuales, que han experimentado un crecimiento alarmante en los últimos años. La inteligencia artificial (IA), con su capacidad para clonar voces y crear videos falsos hiperrealistas conocidos como ‘deepfakes’, ha añadido una capa de sofisticación a estas prácticas delictivas, haciendo aún más difícil distinguir entre lo real y lo falso.
Un Auge Inquietante: El Ascenso de las Ciberestafas
Según un reciente informe de la ONG Defendamos Buenos Aires, las estafas en redes sociales en Argentina han alcanzado cifras récord en 2024, superando las 20.000 causas. Este número representa un aumento explosivo en comparación con las 5.600 causas registradas en 2023, lo que evidencia la gravedad del problema. El uso de la IA para clonar voces en WhatsApp, técnica conocida como ‘vishing’, permite a los estafadores hacerse pasar por familiares o amigos en situaciones de emergencia, solicitando dinero con pretextos convincentes. La facilidad para manipular audios y videos con IA ha llevado a la creación de ‘deepfakes’ tan realistas que incluso han engañado a expertos judiciales, lo que demuestra el potencial de esta tecnología para el engaño.
El fenómeno no se limita a Argentina. En América Latina, se estima que ocurren más de mil ataques de ‘phishing’ por minuto, un tipo de estafa que busca obtener información personal o financiera a través de mensajes engañosos. Brasil, México, Perú, Colombia y Ecuador son los países más afectados por esta modalidad delictiva. El crecimiento exponencial de las estafas online en España, con un aumento del 509% desde 2016, según la EAE Business School, confirma que la amenaza se extiende a nivel global y que la preocupación por el uso malicioso de la IA en internet es compartida por la mayoría de los ciudadanos.
La IA: Un Arma de Doble Filo en el Ciberespacio
La inteligencia artificial, si bien ofrece innumerables beneficios, también se ha convertido en una herramienta poderosa para los ciberdelincuentes. Su capacidad para automatizar tareas, analizar grandes cantidades de datos y generar contenido sintético, como voces e imágenes, la convierte en un instrumento ideal para crear estafas más sofisticadas y difíciles de detectar. Los ‘deepfakes’, por ejemplo, pueden utilizarse para suplantar la identidad de personas, difundir información falsa o manipular la opinión pública.
Además del ‘vishing’ y los ‘deepfakes’, la IA se utiliza en otras modalidades de estafa, como la creación de sitios web fraudulentos con el dominio ‘.ai’, que buscan imitar a empresas legítimas del sector de la inteligencia artificial. Incluso se han reportado casos en la frontera entre México y Estados Unidos donde grupos criminales utilizan la IA para generar fotos y videos falsos de migrantes desaparecidos, extorsionando a sus familias con la promesa de su liberación.
El ‘Phishing’: El Engaño Persistente en la Red
El ‘phishing’ continúa siendo una de las modalidades de ciberestafa más comunes. Se basa en el envío masivo de correos electrónicos, mensajes de texto o llamadas telefónicas que buscan engañar a las víctimas para que revelen información personal, como contraseñas, números de tarjetas de crédito o datos bancarios. Los mensajes suelen simular provenir de entidades confiables, como bancos, empresas de servicios o redes sociales, utilizando logotipos y diseños similares para generar confianza. En Galicia, España, se ha registrado un aumento significativo de las ciberestafas, representando una cuarta parte del total de delitos en 2021. La proliferación de mafias internacionales que operan en la ‘Dark Web’ y comercian con datos obtenidos a través de ‘phishing’ agrava aún más la situación, dificultando la persecución de los responsables y la recuperación de los fondos sustraídos.
Existen diversas variantes del ‘phishing’, como el ‘smishing’, que utiliza mensajes de texto (SMS) para engañar a las víctimas, y el ‘vishing’, que se realiza a través de llamadas telefónicas. El ‘fraude al CEO’, otra modalidad en auge, consiste en suplantar la identidad de un alto directivo de una empresa para ordenar transferencias bancarias fraudulentas al departamento contable.
- Verificar siempre la dirección del remitente y la URL del sitio web antes de ingresar datos personales o financieros.
- Desconfiar de mensajes que ofrecen beneficios exagerados, premios inesperados o solicitudes urgentes de dinero.
- No abrir enlaces ni archivos adjuntos de correos electrónicos o mensajes de remitentes desconocidos o sospechosos.
- Utilizar contraseñas seguras y diferentes para cada cuenta online.
- Activar la autenticación de dos factores en todas las cuentas que lo permitan.
- Mantener el software y los sistemas operativos actualizados con los últimos parches de seguridad.
- Reportar cualquier actividad sospechosa a las autoridades competentes.
Recomendaciones para Navegar Seguros en la Era Digital
En un entorno digital cada vez más complejo, la prevención es la mejor defensa contra las ciberestafas. Es fundamental adoptar una actitud proactiva y estar alerta ante cualquier señal de alerta. La educación y la concienciación son cruciales para evitar ser víctima de estos delitos. Aprender a identificar las tácticas utilizadas por los ciberdelincuentes y tomar medidas preventivas puede marcar la diferencia entre la seguridad y el riesgo.
Ante cualquier duda o sospecha, es recomendable contactar directamente con la entidad o persona que supuestamente envió el mensaje o la llamada para verificar su autenticidad. No dude en buscar asesoramiento profesional o reportar el incidente a las autoridades si cree haber sido víctima de una ciberestafa.