Córdoba se posiciona a la vanguardia en materia de seguridad ciudadana con la implementación de armas no letales para sus guardias urbanos. Esta iniciativa, que ya se encuentra en marcha en la ciudad de Córdoba y Villa María, representa un cambio de paradigma en la prevención del delito, apostando por métodos menos letales para controlar situaciones de riesgo.
Capacitación y Equipamiento: El Proceso de Implementación
Un total de 25 guardias urbanos de la ciudad de Córdoba han completado exitosamente un curso de capacitación en el uso de las pistolas Byrna. Estas armas, que disparan balines de goma o gas pimienta, proporcionan una opción intermedia entre la fuerza física y el uso de armas de fuego. De forma similar, Villa María cuenta ya con 12 guardias urbanos entrenados.
La capacitación, impartida por instructores de la Policía de Córdoba, no se limita a la mera instrucción del manejo del arma. Se hace hincapié en el uso excepcional y disuasivo de las armas de letalidad reducida, como último recurso después de agotar las vías de diálogo y la búsqueda de soluciones pacíficas.
El Rol de la Provincia y la Colaboración Municipal
El Ministerio de Seguridad de Córdoba ha jugado un papel fundamental en la provisión de equipamiento y capacitación. Según el Secretario de Prevención y Coordinación Institucional, José Gualdoni, las ciudades de Córdoba y Villa María ya recibieron los chalecos antibalas, y la entrega de las pistolas Byrna depende solo de la coordinación entre municipios y provincia.
Este programa se extiende más allá de estas dos ciudades. San Francisco ha solicitado la capacitación de 25 guardias, mientras que Río Cuarto ha expresado su interés y ya cuenta con chalecos antibalas para su personal. El Ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, ha destacado la adquisición de 600 vehículos para apoyar a las guardias urbanas en todo el territorio provincial, un despliegue que busca abarcar un total de más de 280 municipios adheridos.
El Diplomado en Seguridad y Convivencia: La Formación Obligatoria
Para acceder al equipamiento de armas no letales, los guardias urbanos deben completar el Diplomado en Seguridad y Convivencia. Desde abril hasta noviembre, cerca de 1800 aspirantes de 198 municipios han iniciado esta capacitación obligatoria ofrecida en modalidad híbrida por la Universidad Nacional de Villa María (UNVM).
Este diplomado, con una duración de dos meses y diez días, consta de cinco módulos presenciales y otros cinco remotos. Una vez completado, los municipios podrán solicitar capacitación específica en el uso de armas no letales. Actualmente, hay 400 diplomados, y se espera que la cifra llegue a 1000 antes de fin de año, con muchos municipios turísticos completando el plan preventivo del Operativo Verano.
Un Cambio de Paradigma en la Seguridad
La implementación de armas no letales en las guardias urbanas es un hecho sin precedentes. Este programa provincial busca mejorar la seguridad ciudadana a través de la prevención, la articulación entre fuerzas policiales y guardias locales, y la capacitación integral de los agentes. La provincia de Córdoba lidera el país en la implementación de esta tecnología.
Según el ministro Quinteros, equipar al 100% de la fuerza policial con estas armas es una apuesta por sumar tecnología que permita al policía en calle escalar la respuesta ante situaciones de conflicto: desde el diálogo y la fuerza física, hasta el uso de estas armas no letales como último recurso.
El Futuro de la Seguridad en Córdoba: Expansión y Colaboración
El éxito de esta iniciativa ha generado un gran interés, incluso desde países vecinos. La provincia de Córdoba ya está en contacto con autoridades de las policías nacionales de Uruguay y Brasil, mostrando la influencia de este nuevo modelo. La experiencia de Córdoba podría servir de modelo a otras jurisdicciones, tanto en Argentina como en Latinoamérica.
Con la adhesión de más municipios al programa, se espera una expansión significativa de las guardias urbanas equipadas con armas no letales, contribuyendo a un ambiente de mayor seguridad y control preventivo en toda la provincia. Este sistema representa un modelo de trabajo conjunto entre gobierno y municipios que promueve la mejora continua en la seguridad ciudadana.