El 19 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Prevención del Abuso Sexual Infantil, una fecha crucial para recordar la importancia de proteger a niños, niñas y adolescentes de esta problemática. La lucha contra el abuso exige acciones urgentes en diversos frentes, desde la prevención y detección hasta la atención integral de las víctimas y sus familias.
El llamado de ASAPMI: Acciones para la prevención y detección
La Asociación Argentina de Prevención del Maltrato Infanto-Juvenil (ASAPMI) ha emitido un comunicado instando a la implementación de medidas concretas para combatir el abuso sexual infantil. El comunicado destaca la necesidad de políticas públicas integrales que no solo prevengan el abuso, sino que también mejoren los mecanismos de detección y atención interdisciplinaria de los casos.
ASAPMI subraya la importancia del compromiso del Estado, las organizaciones civiles y la sociedad en general en la lucha contra esta problemática. La asociación enfatiza la necesidad de abordar el tema desde una perspectiva holística, incluyendo la reparación de las víctimas y sus familias, y la capacitación de profesionales para la atención adecuada de estos casos.
- “Promover campañas de concientización pública que informen sobre las señales de alerta del abuso sexual infantil”
- “Capacitar a profesionales y personal de instituciones (educativas, deportivas, sanitarias) en la identificación y el manejo de casos de abuso”
- “Establecer líneas telefónicas y plataformas online de denuncia segura y anónima”
- “Implementar protocolos claros y efectivos para la intervención judicial en casos de abuso sexual infantil”
- “Crear centros de apoyo especializados para víctimas y sus familias, ofreciendo contención y recursos psicológicos y legales”
Romper el silencio: La clave para la lucha contra el abuso
Según la especialista María Fernanda Vasco Piñasco, el secreto es la principal arma del abusador. El silencio impuesto a las víctimas es fundamental para que este delito prospere. Romper este silencio, hablar abiertamente sobre el abuso sexual infantil y promover la denuncia, es crucial para la prevención y la erradicación del problema.
Vasco Piñasco recalca la importancia de la educación sexual integral desde edades tempranas. La educación sexual integral, impartida de manera apropiada a la edad, empodera a los niños, niñas y adolescentes con el conocimiento necesario para reconocer situaciones de riesgo y denunciar posibles abusos.
La especialista también enfatiza la necesidad de creer en las víctimas y apoyarlas en su proceso de denuncia. Muchas veces, los niños y niñas pueden tardar en denunciar por miedo, culpa o incluso por la manipulación del abusador. Es fundamental generar espacios seguros donde los niños se sientan cómodos para expresar lo que les sucede.
A pesar de los avances legales y judiciales en la materia, Vasco Piñasco advierte sobre la falta de políticas públicas de infancia integrales a nivel nacional. La carencia de estadísticas confiables dificulta el análisis de la magnitud del problema y el diseño de políticas que aborden eficientemente la problemática.
El rol fundamental de la Justicia y las políticas públicas
Si bien se destacan avances en la respuesta judicial a las denuncias de abuso sexual infantil, la falta de un sistema integral de protección a nivel nacional dificulta la efectividad en la lucha contra este delito. La legislación argentina contempla penas severas para el abuso sexual, pero la protección y la justicia integral para las víctimas y sus familias requieren de un gran trabajo.
Para que la justicia pueda actuar de manera eficaz es crucial mejorar la coordinación entre las instituciones involucradas y garantizar que las denuncias sean investigadas rápidamente y que las víctimas y sus familias reciban el apoyo y la protección necesarios. La implementación de la Ley Lucio es un paso en la dirección correcta, pero es necesario consolidarla y asegurar su aplicación en todas las jurisdicciones del país.
Un compromiso colectivo: El camino hacia la protección de la infancia
La lucha contra el abuso sexual infantil requiere un esfuerzo conjunto y la colaboración entre las instituciones, la sociedad civil, y los individuos. Es necesario fortalecer la prevención a través de la educación y la concientización, mejorar la detección a través de la capacitación de profesionales y el fortalecimiento de canales de denuncia, y garantizar una respuesta integral a las víctimas que incluya la atención psicológica, médica y legal necesaria para su recuperación.
La protección de la infancia es responsabilidad de todos. Es fundamental fomentar la cultura de la denuncia, romper el silencio y trabajar unidos para crear un ambiente seguro para niños, niñas y adolescentes libres de abuso y violencia. Solo a través del compromiso individual y colectivo podremos erradicar este problema que afecta a miles de menores en Argentina.