El próximo 4 de febrero se llevará a cabo un nuevo intento de peritar el celular de Fernando Sabag Montiel, el hombre acusado de intentar asesinar a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Este será el tercer y posiblemente último intento de acceder a la información contenida en el dispositivo, luego de varios intentos fallidos y suspensiones.
Un proceso complejo y accidentado
El peritaje del teléfono de Sabag Montiel ha estado plagado de obstáculos desde el principio. Inmediatamente después de su detención, la Policía Federal intentó acceder al teléfono, sin éxito. Luego, la Policía de Seguridad Aeroportuaria realizó otro intento, resultando en un reseteo del teléfono a su configuración de fábrica, posiblemente debido a una manipulación incorrecta, hecho que está siendo investigado por la jueza María Servini.
Estos fallos iniciales llevaron a la solicitud de asistencia a Israel por parte de la querella de Cristina Kirchner, bajo la expectativa de que pudieran contar con tecnología superior. Si bien la respuesta de la embajada israelí fue positiva en principio, no se recibió una respuesta concreta sobre la asistencia técnica ofrecida, lo que ha dilatado el proceso de peritaje. Por esto mismo, luego de 10 meses de espera por la respuesta de Israel y luego de varias investigaciones preliminares que demostraron la viabilidad del procedimiento, se ordenó reanudar el peritaje por el TOF 6.
El último intento: riesgos y consecuencias
El peritaje que se realizará en febrero estará a cargo de la DATIP (Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal) de la Procuración General de la Nación y la Gendarmería Nacional. Sin embargo, existe una advertencia importante: los expertos han señalado que el procedimiento conlleva un riesgo significativo de dejar el teléfono inutilizado de forma permanente.
Este riesgo se debe a la complejidad del proceso de recuperación de datos, que implica un “rooteo” del sistema operativo del teléfono, un procedimiento que puede dañar el dispositivo si no se realiza con precisión. A pesar de esto, se considera que esta es la última oportunidad para acceder a la información contenida en el celular, por lo que se decidió seguir adelante a pesar del riesgo de perder completamente los datos.
Posibles evidencias y el juicio
Si el peritaje es exitoso, la información recuperada del teléfono de Sabag Montiel podría ser crucial para el juicio oral que está en curso. Mensajes, chats, fotos y videos podrían brindar información adicional sobre los hechos, así como sobre los posibles móviles del atentado y, potencialmente, aportar evidencia clave sobre la existencia de posibles autores intelectuales del atentado.
La información podría ayudar a esclarecer diferentes aspectos del atentado. Los fiscales esperan que el contenido del teléfono pueda dar luz a las conexiones entre Sabag Montiel, su ex pareja Brenda Uliarte, y otros posibles involucrados, así como arrojar luz sobre el móvil del crimen o descartar la posibilidad de la existencia de autores intelectuales.
Las consecuencias de un fracaso
La posibilidad del fracaso del peritaje, y la consecuente pérdida definitiva de datos, genera una gran preocupación. Si la información del teléfono se pierde irrevocablemente, se perdería una pieza importante de la investigación, potencialmente dificultando el esclarecimiento completo de los hechos y las responsabilidades en el atentado contra Cristina Fernández de Kirchner.
Esta situación pone de manifiesto la dificultad de las investigaciones digitales, especialmente cuando se enfrentan a la complejidad de la tecnología móvil y a la necesidad de equilibrar la obtención de evidencia crucial con la preservación de la evidencia misma.
El juicio y sus implicados
Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Nicolás Carrizo son los tres acusados en el juicio oral por el intento de asesinato de la vicepresidenta. Sabag Montiel, quien disparó el arma, ha declarado que quería matar a Cristina Kirchner, mientras que Uliarte también está implicada en el plan.
El juicio está en curso, y la información obtenida del celular de Sabag Montiel podría tener un impacto decisivo en la sentencia final. La expectativa es alta, no solo en relación a las personas directamente involucradas en el atentado, sino también en la posibilidad de que se descubran conexiones con autores intelectuales, una línea de investigación todavía abierta y crucial para cerrar este caso.
La espera por la verdad
El próximo peritaje es el último intento por obtener información clave sobre el atentado. La posibilidad de que la información se pierda para siempre pone de relieve la fragilidad de la evidencia digital y la importancia de las técnicas forenses digitales.
A la espera de los resultados, la sociedad argentina observa con expectativa, ansiosa por conocer las conclusiones del peritaje y las consecuencias que pueda tener para el esclarecimiento del hecho y la impartición de justicia.