El juez Juan Carlos Maqueda, a punto de jubilarse tras 22 años en la Corte Suprema de Justicia de Argentina, brindó una entrevista donde reflexionó sobre la polarización política, la creciente judicialización de conflictos y el futuro del máximo tribunal. Sus declaraciones, inusuales dada su larga trayectoria de bajo perfil mediático, ofrecen una perspectiva única sobre la actualidad argentina.
La judicialización de la política: un problema de consenso
Maqueda destaca la preocupante tendencia a la judicialización de conflictos que antes se resolvían mediante el diálogo político. La Corte Suprema recibe entre 10.000 y 20.000 demandas al año, una cifra que evidencia el fracaso parcial de los mecanismos de acuerdo. El juez compara la situación con el sistema norteamericano, donde la Corte selecciona un número limitado de casos para fallar, asegurando una revisión exhaustiva y la optimización de recursos. Esta situación de sobrecarga impacta inevitablemente en la eficiencia del sistema judicial argentino.
En su opinión, esta problemática tiene su raíz en una “cultura de la conflictividad” extendida en la sociedad, donde la vía judicial se convierte en la primera opción para resolver disputas, incluso en asuntos que deberían resolverse a través del acuerdo político. Maqueda cita ejemplos como los conflictos en materia de federalismo fiscal, donde las provincias han debido acudir a la justicia ante incumplimientos por parte del Estado Nacional.
El caso de Cristina Kirchner y la Corte Suprema
El reciente fallo de la Cámara de Casación sobre Cristina Kirchner, caso que podría llegar a la Corte Suprema, fue un punto clave de la conversación. Maqueda recalcó que la Corte no prioriza causas por la relevancia pública o la identidad de los involucrados; la decisión de tomar un caso se basa en su complejidad y su recorrido judicial. Si bien los medios sugieren una intervención inminente de la Corte, el proceso aún se encuentra en fases preliminares y requiere de pasos adicionales para que la Corte lo pueda tratar.
Para Maqueda, que Cristina Kirchner sea expresidenta no convierte automáticamente su caso en extraordinario. El recurso extraordinario exige demostrar una causa federal o una arbitrariedad significativa, aspectos que serán determinados por los jueces de la Cámara de Casación antes de decidir si elevan o no el caso a la Corte. Existen vías alternativas, como el Recurso de Queja, para llegar directamente a la Corte, aunque el proceso resulta prolongado, lo que implica que la condena en cuestión permanece, en la práctica, suspendida durante un tiempo indefinido.
La salida de Maqueda de la Corte Suprema
Maqueda cumplirá 75 años el 29 de diciembre y se jubilará. La decisión del gobierno, anunciada anticipadamente, sorprendió al juez, que se enteró a través de los medios. Si bien la Constitución faculta al Presidente a solicitar una prórroga, esta no fue considerada en su caso. Maqueda afirmó que el anuncio lo sorprendió por la antelación; sin embargo, admite que 22 años en la Corte representan un período considerable.
Al momento de su entrevista, todavía quedaban decisiones pendientes en la Corte. El juez menciona las disidencias entre sus colegas, indicando que el trabajo hasta el 29 de diciembre se enfocará en esos temas. En este sentido, el juez pone de manifiesto la importancia del trabajo en equipo y el consenso dentro de la corte para la eficiencia del proceso judicial.
El futuro de la Corte Suprema: diálogo y representatividad
En referencia a la composición de la Corte, Maqueda comenta sobre la fluctuación en el número de miembros durante su tiempo en el tribunal. Si bien afirma que la corte ha funcionado con 3 miembros, admite que se trata de una situación viable solo para transiciones breves. Para el juez, la cantidad ideal para un adecuado funcionamiento, especialmente dado el alto volumen de casos, debe ser mayor.
Sobre la discusión en torno a la representación de género en la Corte, Maqueda se refiere a la disposición constitucional que coloca la designación de jueces fuera de la órbita del Poder Judicial. En consecuencia, declara su incapacidad para expresar una opinión al respecto, destacando la importancia de que la Corte tenga en cuenta el criterio de representación de genero y que la mujer se encuentre representada, pero recalca su incapacidad para opinar al respecto por los procesos constitucionales existentes.
La necesidad del diálogo institucional
La entrevista con el juez Juan Carlos Maqueda deja en claro la urgencia de un cambio de rumbo en la cultura política argentina. La sobrecarga del sistema judicial, la judicialización de conflictos políticos y la necesidad de un diálogo institucional genuino son desafíos centrales para el futuro del país. La jubilación de Maqueda marca un punto de inflexión, una oportunidad para reflexionar sobre la importancia del consenso y la búsqueda de soluciones consensuadas.
Sus declaraciones finales sobre la necesidad del dialogo institucional y la importancia de buscar soluciones consensuadas enfatizan la importancia de retomar los pactos y acuerdos que puedan generar políticas de estado, que favorezcan el funcionamiento del sistema judicial y el respeto del estado de derecho.